Los accidentes en carretera provocados por el abuso de alcohol y la imprudencia, enfermedades respiratorias que llegan de la mano de los frentes fríos y el incremento de los incendios, entre otros, son la otra cara de las celebraciones de fin de año.
No todo es celebración en las fiestas de fin de año. Los riesgos de accidentes de tránsito, incendios, enfermedades respiratorias, quemaduras y los disparos al aire amenazan la vida de los guatemaltecos.
La ingesta de alcohol, la velocidad, las bajas temperaturas, los juegos pirotécnicos y la imprudencia se confabulan por estas fechas para que algunas familias pasen de la celebración al llanto.
Según el Departamento de Tránsito de la Policía Nacional Civil (DTPNC), en el territorio nacional ocurren en promedio diario de 18 a 22 accidentes de tránsito, lo que se traduce en promedio en la muerte de cinco personas, estos hechos trágicos en un 80 por ciento obedecen al factor humano; es decir, se pudieron evitar.
Los percances en carreterras se agravan en diciembre. En el último mes del año, estima la DTPNC, ocurren diariamente alrededor de 30 accidentes, que dejan un saldo de unos ocho o 10 fallecidos.
El último mes del año es crucial para la seguridad vial, derivado de los festejos de convivios, porque se dan actividades sociales en donde tienen desenlaces fatales por la ingesta de bebidas alcohólicas. La prohibición no es consumir bebidas alcohólicas, sino conducir en estado de ebriedad, subraya Dalia Santos, vocera de DTPNC.
En este sentido, resalta la portavoz, se estarán llevando a cabo supervisiones para evitar el consumo de bebidas alcohólicas en conductores tanto de vehículos particulares como en el transporte urbano y extraurbano.
Entre enero y noviembre del 2016, los hechos trágicos en carreteras aumentaron 25 por ciento en comparación con el mismo período del año anterior y dejaron 1 mil 708 muertos y 8 mil 75 lesionados, afirma el Observatorio Nacional de Seguridad de Tránsito.
Aumentan emergencias
El Cuerpo de Bomberos Municipales (CBM) atiende en los primeros diez meses del año entre 250 a 280 emergencias diarias; sin embargo, estas aumentan en los meses de noviembre y diciembre a 350.
Así lo comenta Erwin Villagrán, jefe de Relaciones Públicas del CBM, quien luego explica que los llamados de socorro en los dos últimos meses incluyen, entre otros, incendios, accidentes viales y hasta intoxicación por excesivo consumo de alcohol y por ingesta de alimentos.
En algunos casos los incendios son provocados por los juegos pirotécnicos, por lo que el socorrista aconseja a los padres de familia tener una estricta supervisión de los menores cuando manipulen esos artefactos de temporada.
Villagrán también sugiere no sobrecargar los árboles navideños con luces, porque esto puede generar un cortocircuito e incendiar las casas, y no conducir en estado de ebriedad.
Enfermedades y violencia
Los vientos fríos representan un riesgo porque pueden provocar enfermedades bronco-respiratorias, sobre todo en menores de cinco años y personas de la tercera edad, por eso se recomienda abrigarlos bien por estas fechas.
Pero las amenazas no terminan ahí. Los disparos al aire también provocan heridos y hasta defunciones. Jorge Aguilar, vocero de la PNC, hizo un llamado para que no se dispare al aire en las fiestas de fin de año —ni en cualquier otro día del año— debido a que este hecho es tipificado como delito y las personas pueden ser detenidas y trasladadas a tribunales, incluso si el arma es legal, porque se pone en riesgo la vida de otras personas.
Recordó que el año pasado se detuvo y consignó a 10 personas por este tipo de hechos y que las cárceles también se ponen en alerta, debido a que algunos reos aprovechan las fiestas para concretar sus planes de fuga.
Es por todo ello que a partir de diciembre se suspenderán las vacaciones y descansos de los 35 mil 359 agentes de la PNC, dice Aguilar.