Los futbolistas internacionales rusos Pavel Mamaev y Alexander Kokorin, condenados en mayo a más de un año de prisión por actos violentos tras una noche de fiesta, fueron puestos este martes en libertad condicional por «buena conducta».
Un tribunal ruso había tomado esta decisión a comienzos de septiembre, afirmando «haber tenido en cuenta el comportamiento de los condenados durante su detención».
Pavel Mamaev, Alexander Kokorin y el hermano de este último se dedicaron especialmente «al taller de costura» de su prisión.
Durante su detención, Alexander Kokorin (28 años, 48 partidos internacionales) y Pavel Mamaev (30 años, 15 internacionalidades) participaron asimismo en numerosos torneos de fútbol en la prisión.
La televisión rusa ofreció imágenes de ambos hombres saliendo de su prisión en la región de Bélgorod, en el sudoeste de Rusia, vestidos con ropa oscura y una gorra negra, antes de meterse en un vehículo, rechazando responder a las preguntas de los periodistas presentes.
En octubre de 2018, tras una salida nocturna, los dos futbolistas y sus compañeros atacaron con violencia en la calle al chófer de una presentadora de televisión y horas después a dos altos funcionarios del ministerio ruso de comercio mientras tomaban un café.
Ilocalizables durante más de 24 horas, los dos deportistas acabaron entregándose a la policía. En mayo fueron condenados a 17 y 18 meses de cárcel.