El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha anunciado que su Gobierno ofrecerá asilo político al fundador de Wikileaks, Julian Assange, después de «celebrar» que un tribunal de Reino Unido haya rechazado la petición de extradición planteada por Estados Unidos.
Para López Obrador, la decisión tomada este lunes por una jueza de Londres supone «protección» para Assange, que se enfrentaba a un proceso penal en Estados Unidos que podría suponerle una pena de hasta 175 años de prisión. Las autoridades estadounidenses lo acusan de espionaje por la filtración de documentos confidenciales.
El mandatario mexicano ha instruido al Ministerio de Exteriores que inicie los trámites ante el Gobierno británico, de tal forma que Assange «quede en libertad» y pueda beneficiarse el asilo en México. «Es protección, pero al mismo tiempo es responsabilidad», ha explicado en su rueda de prensa diaria.
Indulto
López Obrador también se ha mostrado «a favor» de que se le indulte, en un mensaje indirecto a su homólogo de Estados Unidos, Donald Trump, en quien recae a día de hoy esta competencia. El entorno de Assange se ha pronunciado en varias ocasiones a favor de este hipotético indulto.
En respuesta, un abogado del equipo legal de Assange, Aitor Martínez, ha destacado que es «una buena noticia porque demuestra que la comunidad internacional se preocupa por la protección de Julian Assange como periodista», aunque ha advertido que el fallo emitido este lunes por la Justicia británica «no es firme, por lo que todavía no puede abandonar la jurisdicción británica».
Assange «sigue sometido a la jueza Vanessa Baraitser, que podrá acordar la fórmula en la que se produzca o no la libertad condicional», ha explicado Martínez. Una vez se resuelva esa cuestión, esperan que la «resolución devenga firme».
El programador ya recibió en 2012 el asilo de Ecuador, que le acogió durante años en su Embajada de Londres. El Ejecutivo de Rafael Correa pidió en vano a las autoridades británicas un salvoconducto que le permitiese abandonar Reino Unido y desplazarse al país sudamericano.
Sin embargo, el actual presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, nunca ocultó su malestar con este gesto realizado por su predecesor y finalmente en 2019 la Policía británica pudo detener al fundador de Wikileaks en la legación diplomática. Desde entonces, Assange permanece en una prisión de Londres.