París, Francia
Las pantallas plegables, propias de los teléfonos celulares de última generación, llegan ahora al mundo de la moda de la mano de Louis Vuitton que comercializará en 2020 un bolso conectado, señal de la vertiginosa influencia del mundo digital y de la imagen en el sector del lujo.
El viernes, el grupo LVMH y su marca principal Louis Vuitton, primera marca de moda en el mundo en términos de ventas por delante de Chanel y Gucci, presentaron dos prototipos de bolsos en Vivatech de París, salón dedicado a las nuevas tecnologías.
El primer modelo dispone de dos pantallas ligeramente curvas para adaptarse a la forma redonda del bolso, mientras que el segundo -más grande- tiene un total de cuatro pantallas adheridas a la famosa piel monograma de la marca.
La tecnología utilizada por Louis Vuitton fue desarrollada por Royole –una start-up china cuya sede social está en California- pionera junto a otros fabricantes (en especial Samsung y Huawei) en el mercado de los teléfonos móviles con pantallas plegables.
Bernard Arnault, director de LVMH, confirmó que Louis Vuitton comercializará este bolso conectado. «Fue presentado [el 9 de mayo] en Nueva York durante el desfile ‘Crucero’, habrá que esperar un poco» para que esté en las tiendas, indicó en el stand del grupo en Vivatech.
El equipo de Louis Vuitton, que desarrolló este proyecto de «internet del futuro», habla de una comercialización «en el segundo semestre de 2020» del bolso conectado, por un precio que no fue precisado.
El propietario del bolso podrá seleccionar y hacer desfilar a partir de su smartphone imágenes o videos en estas pantallas, que son igualmente táctiles.
La imagen que se quiere dar de sí mismo
«LVMH está muy conectado a estas nuevas tecnologías, al mundo digital. Y el lujo, los productos de alta calidad, son universos muy interactivos con el mundo digital. Su futuro, su desarrollo, su crecimiento están vinculados a esto», resumió Bernard Arnault.
Para Damien Douani, experto en innovación digital, «no es sorprendente que un grupo como LVMH se interese en una tecnología emergente; como gigante del lujo debe ofrecer lo más avanzado y exclusivo».
En términos de uso, «estamos más ante un ‘display‘, es decir difusión de imágenes o de videos, que en una lógica de consulta» de emails o de redes sociales desde las pantallas del bolso, indicó a la AFP.
«Un bolso así también permite elegir la imagen que se quiere dar de sí mismo a los demás, con fotos o videos a medida, personalizados, que se muestran en las pantallas, y que en cierta medida se imponen a los demás», estimó.
En cuanto al precio, sea cual sea, Damien Douani estima que «siempre habrá compradores para este tipo de producto».
La empresa Royole comercializa su smartphone plegable FlexiPai -que se puede transformar en tablette- por 1.300 euros en su web, donde vende otros productos con «visualización flexible» como camisetas o sombreros, para «una nueva forma única de expresarse visualmente».
Para Damien Douani, «lo que será también interesante de ver en cuanto al bolso conectado, además de la autonomía de las pantallas o su impermeabilidad, por ejemplo, será la manera en la que Louis Vuitton administre el servicio posventa».