Bale, el único héroe. El galés junto a James Rodríguez fueron los grandes protagonistas del Real Madrid en la primera parte. En la segunda, no apareció nadie pero el galés con un cabezazo decidió el encuentro cuando todo hacía indicar que iba a acabar 0-0.
La presión blanca. El Real Madrid evitó que la Real Sociedad pudiera tener el dominio del juego con una presión posicional que no dejó enlazar jugadas a los donostiarras a no ser que fueran por banda.
Los canteranos. Zinedine Zidane visto que tenía muchas bajas ante la Real Sociedad decidió tirar de cantera y puso sobre el césped a Nacho, Lucas Vázquez y Borja Mayoral para intentar dotar de mayor espíritu al equipo.
Una Real sin ‘punch’. Eusebio Sacristán dispuso de una alineación algo conservadora sin ningún delantero centro en el equipo por las bajas de Vela, Agirretxe y Jonathas. Oyarzábal fue el encargado de hacer de falsa referencia. Las llegadas por banda no encontraron a quien rematar.
Rulli. El portero de la Real Sociedad fue el protagonista en todo lo positivo de los donostiarras. Demostró sus reflejos con varias paradas de mucho mérito y acabó con una ovación del público en la última jugada cuando subió a rematar en la última oportunidad del partido.
Redacción por: Don Balón.