La Unión Europea y Japón anunciaron este viernes en un comunicado conjunto haber finalizado el acuerdo de libre comercio que negociaban desde 2013.
«Celebramos la finalización» del acuerdo, señalaron el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, y el primer ministro japonés, Shinzo Abe, para quienes, con ello, «envían un mensaje fuerte al mundo».
Ambas partes ya alcanzaron un «acuerdo político», simbólico, en julio de 2017, antes de una cumbre de mandatarios del G20 en Hamburgo (Alemania), la primera desde la llegada al poder del presidente estadounidense, Donald Trump, visto como un proteccionista en materia comercial.
El acuerdo finalizado no incluye, sin embargo, la parte vinculada a la delicada cuestión del sistema para resolver los diferendos entre Estados e inversores, sobre el que la UE y Japón no logran ponerse de acuerdo.
Los países del bloque y la Eurocámara deben ahora dar su visto bueno al acuerdo, indicó la comisaria europea de Comercio, Cecilia Malmström, sin precisar si los parlamentos nacionales deben ratificarlo.
La cuestión sobre la ratificación nacional de los acuerdos de libre comercio negociados por la Comisión en nombre de los 28 países del bloque es objeto de debate en la UE.
El ejecutivo comunitario se contentaría simplemente con el visto bueno de la Eurocámara, pero varios países prefieren que estos acuerdos, blanco de críticas de la opinión pública, prefieren el proceso más lento y complejo de las ratificaciones nacionales.
Las negociaciones entre Japón y la UE comenzaron en marzo de 2013 en medio de una casi indeferencia total, contrariamente a los acuerdos negociados entre el bloque y Canadá (CETA) o Estados Unidos (TTIP).
Sin bien, hacia el final de las negociaciones en 2017, las críticas se acentuaron, con la oenegé Greenpeace denunciando, por ejemplo, las discusiones llevadas a cabo «a puerta cerrada».
La entrada en vigor de este tratado comercial, entre la UE y su tercer socio comercial, no está prevista antes de inicios de 2019.
Además de Japón y Canadá, la UE también mantiene negociaciones comerciales con los países del Mercosur y con México, cuyo objetivo era inicial era alcanzar un acuerdo para finales de 2017.