Se puede usar una tecnología llamada espectroscopia funcional de infrarrojo cercano (fNIRS, por sus siglas en inglés) para medir de manera objetiva el tinnitus o el zumbido en los oídos, según un nuevo estudio publicado en la revista de acceso abierto PLOS ONE por Mehrnaz Shoushtarian y sus colegas del The Bionics Institute, en Australia.
El tinnitus, la percepción de un zumbido o zumbido agudo en los oídos, afecta hasta al 20% de los adultos y, cuando es grave, se asocia con depresión, disfunción cognitiva y estrés.
Gravedad de la afección
A pesar de su amplia prevalencia, no ha habido una forma objetiva utilizada clínicamente para determinar la presencia o la gravedad del tinnitus.
En el nuevo estudio, los investigadores recurrieron a la fNIRS, un método de imágenes no invasivo y no radiactivo que mide los cambios en los niveles de oxígeno en sangre dentro del tejido cerebral.
El equipo usó fNIRS para rastrear la actividad en áreas de la corteza cerebral previamente vinculadas al tinnitus.
Estudio
Recopilaron datos de fNIRS en estado de reposo y en respuesta a estímulos auditivos y visuales en 25 personas con tinnitus crónico y 21 controles emparejados por edad y pérdida auditiva.
Los participantes también calificaron la gravedad de su tinnitus utilizando el Inventario de discapacidades por tinnitus.
La fNIRS reveló una diferencia estadísticamente significativa en la conectividad entre áreas del cerebro en personas con y sin tinnitus. Además, la respuesta del cerebro a los estímulos visuales y auditivos se redujo entre los pacientes con tinnitus.
- Cuando se aplicó un enfoque de aprendizaje automático a los datos
- un programa podría diferenciar a los pacientes con tinnitus leve / leve de aquellos con tinnitus moderado / severo con una precisión del 87.32%.
- Los autores concluyen que la fNIRS puede ser una forma factible de evaluar objetivamente el tinnitus para evaluar nuevos tratamientos
- o monitorizar la efectividad del programa de tratamiento de un paciente.
Conclusiones
Los autores añaden: «Al igual que la sensación en sí, la gravedad del tinnitus de un individuo solo lo conocía previamente la persona que padecía la afección.
Hemos combinado el aprendizaje automático y las imágenes cerebrales no invasivas para cuantificar la gravedad del tinnitus. Nuestra capacidad para rastrear los complejos cambios que desencadena el tinnitus en el cerebro de un paciente es fundamental para el desarrollo de nuevos tratamientos».