- En Estados Unidos se encuentran cientos de miles de guatemaltecos indocumentados, que aportan, en gran medida, a las remesas familiares que se han convertido en sostén de la economía.
Luego de los resultados contundentes en las elecciones del martes en Estados Unidos, la comunidad de inmigrantes indocumentados en EEUU, que incluye a cientos de miles de guatemaltecos, enfrenta creciente incertidumbre ante el retorno de Donald Trump a la Casa Blanca, por el temor de que cumpla sus promesas de campaña.
Durante su primer mandato, Trump implementó políticas de inmigración rígidas que impactaron duramente a millones de personas, y ahora, con su regreso al poder existe la amenaza de que aplique su política de “cero tolerancia” contra los indocumentados.
La administración Trump (2017-2021) estuvo marcada por una postura de línea dura en inmigración. Implementó políticas que endurecieron el proceso de solicitud de asilo, aumentaron los controles migratorios y redujeron las vías legales para inmigrantes. La política de «tolerancia cero», incluyó la separación de familias en la frontera, y el intento de acabar con el programa DACA (Acción Diferida para los Llegados en la Infancia).
Si bien algunas de estas políticas fueron revertidas o limitadas por la administración de Joe Biden, los comentarios y propuestas de Trump en la campaña de 2024 sugieren que al volver a la Casa Blanca restaure e incluso endurezca estas medidas de su primer mandato.
Entre las propuestas de Trump destacan la promesa de realizar deportaciones masivas y la implementación de restricciones de asilo que no solo afectarían a quienes intentan cruzar la frontera, sino a quienes ya están en el país.
Luis* es un trabajador guatemalteco indocumentado en Florida, dice que «aquí se ha vuelto cada vez más difícil encontrar trabajo bien pagado y ahora las cosas empeorarán seguramente». Luis vive en Florida desde hace casi dos décadas y sus hijos han estudiado y confiaban en legalizar su situación con el plan de regulación migratoria que ofrecía Kamala Harris.
Temor de indocumentados
El triunfo de Trump ha provocado temor entre los indocumentados guatemaltecos, quienes han expresado su preocupación en redes sociales, medios y reuniones comunitarias. El miedo a una posible intensificación de las deportaciones lleva a muchos a vivir con cautela extrema, evitando lugares donde podrían ser detenidos o prefiriendo trabajar en condiciones difíciles para no ser detectados.
Es importante señalar que el temor también abarca a los familiares de inmigrantes indocumentados, muchos de los cuales tienen hijos nacidos en EEUU que enfrentarían la separación si sus padres fueran deportados. Estos niños, ciudadanos estadounidenses, podrían sufrir traumas a largo plazo, y en muchos casos quedarían bajo el cuidado de familiares o en el sistema de protección infantil si sus padres no pudieran permanecer en el país.
También se espera que la administración Trump impulse políticas más duras de control en las ciudades santuario, que han sido refugio para muchos inmigrantes. Asimismo, podrían surgir leyes que criminalicen la ayuda a indocumentados, afectando a iglesias, centros comunitarios y personas que ofrecen apoyo básico a estas comunidades.
El control sobre las ciudades santuario y el refuerzo de alianzas entre la policía local y agencias federales de inmigración también estarían sobre la mesa. Estos cambios en políticas podrían generar un ambiente de vigilancia y hostilidad, donde los inmigrantes temerían más que nunca interacciones con las autoridades, limitando sus movimientos, su acceso a servicios de salud y otros recursos.
Para los guatemaltecos indocumentados, el retorno de Trump a la presidencia de Estados Unidos es vista como una amenaza a sus aspiraciones de estabilidad y seguridad. Adicional a ello, se espera que Trump mantendrá su discurso xenofóbico en sus mensajes, lo que creará un entorno más hostil contra los migrantes hispanos…