El autobús de selección de fútbol de Belice fue detenido por un grupo armado a su llegada a Haití, adonde viajó para disputar su partido de clasificación para el Mundial de Catar 2022, un incidente que se saldó sin heridos después de que la escolta policial negociase con los insurgentes.
«A pesar de la escolta policial de cuatro hombres, el autobús del equipo fue detenido por un alboroto de insurgentes con rifles de asalto en motocicletas y los escoltas policiales se vieron obligados a negociar con ellos para que el autobús del equipo continuara su viaje hacia el hotel«, confirmó en un comunicado la Federación de Fútbol de Belice.
El organismo mostró su «decepción y disgusto» por el incidente. «Es una situación a la que el equipo nunca se debería haber enfrentado, pero nos complace informar que nuestros jugadores, aunque impactados por la terrible experiencia, se encuentran a salvo en su hotel», señaló.
Además, informó de que se mantienen en contacto con la FIFA y con la Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol (Concacaf) para llevarlos «a terrenos más seguros». «Es lamentable que se hayan enfrentado a una experiencia tan traumática», dijo.
El capitán del equipo, Deon McCauley, se declaró «feliz de que todos estén a salvo». «Los felicito por ser valientes. Fue un momento de intenso miedo. Sigamos unidos y tomemos las mejores decisiones para el equipo», subrayó.