Agentes de la Policía Nacional detuvieron a los cuatro presuntos integrantes de un grupo criminal afincado en Ayamonte (Huelva) y dedicado supuestamente a la captación de víctimas en las zonas deprimidas de Guatemala, todas ellas «con mismo perfil, nivel cultural muy bajo y elevado estado de necesidad».
Según indicó el cuerpo policial en una nota de prensa, estas personas eran «embaucadas» por el ofrecimiento de la gestión completa del viaje a España, incluyendo acompañamiento e instrucción para el cruce efectivo de frontera, así como su posterior acogida hasta su asentamiento, y contraían deudas que oscilaban entre los 4,000 y los 6,000 euros.
De este modo, los agentes tuvieron conocimiento de los hechos cuando por medio de un control policial en el que se identificó a una de las víctimas, «que, atemorizada por el continuo asedio por parte de los miembros del grupo», informó de su situación.
Además, han señalado que aún habiendo saldado sus deudas, los detenidos continuaban «mediante coacciones» realizándole cobros por encima de lo acordado, «con amenazas veladas y continuas no solo contra su propia integridad física», sino también contra las de los familiares que permanecen en su país de origen.
En el transcurso de la investigación, «se destapa un complejo entramado delictivo», liderado por una guatemalteca ya nacionalizada, quien, «con apoyo de familiares en su país de origen», había iniciado la actividad delictiva.
Para la desarticulación total del grupo, según ha informado la Policía Nacional, se ha chequeado el pasaje completo de más de 20 «vuelos calientes» durante un periodo de seis meses, ejerciendo un control sobre un centenar de potenciales víctimas.
Esta operación se enmarca dentro del Plan de la Policía Nacional contra la Trata de Seres Humanos con Fines de Explotación Sexual.