La Liga de Fútbol Profesional (LFP) francesa siguió este jueves los mandatos del gobierno de su país por la crisis sanitaria del nuevo coronavirus y decretó la suspensión definitivamente de la temporada 2019-2020 de la Ligue 1, aceptando en su Consejo de Administración una «clasificación final» en la que el París Saint-Germain es el campeón.
En esa clasificación, el Marsella y el Rennes obtienen plaza para disputar la próxima Liga de Campeones, mientras que el gran perdedor entre los grandes es el Lyon, que relegado al séptimo lugar se queda sin billete para las competiciones europeas del próximo curso, algo que no le ocurría a ese club desde hace más de veinte años.
Según la tabla final desvelada por la LFP en una conferencia de prensa telefónica, el Toulouse y el Amiens son los equipos condenados a bajar a la segunda división, mientras que Lorient y Lens ascienden a la élite desde la Ligue 2, lo que podría provocar una ola de litigios o acciones ante la justicia deportiva y administrativa.
Con esta decisión, la LFP pone fin a las últimas preocupaciones de unos y a las esperanzas de otros, dos días después de las declaraciones del primer ministro, Edouard Philippe, que afirmó que «la temporada 2019-2020 de los deportes profesionales no podrá reanudarse», lo que cerraba la puerta a una vuelta de la Ligue 1.
«Esa declaración no tiene ninguna ambigüedad. Debíamos tomar una decisión firme y definitiva sobre la temporada en curso. Hemos decretado el final de la temporada 2019-2020», confirmó Nathalie Boy de la Tour, presidente de la instancia organizadora de la Ligue 1, antes de que Didier Quillot, el director general ejecutivo, desvelara la clasificación.
«Estas decisiones son firmes y sólidas. El Consejo de Administración da fe», insistió Boy de la Tour, mientras que algunos actores del fútbol francés hablaban de la necesidad de una votación en la Asamblea General de la LFP, prevista para el 20 de mayo.