La Administración de Medicamentos y Alimentos de Estados Unidos (FDA) ha aprobado este viernes la autorización de emergencia para el uso de la vacuna de Pfizer-BioNTech en Estados Unidos.
Estados Unidos se ha convertido así en el sexto país del mundo en autorizar el uso de la vacuna tras Reino Unido, Canadá, Baréin, México y Arabia Saudí.
Se espera que durante la semana que viene 2.9 millones de dosis sean enviadas para su uso en el país.
- Los asesores de la institución habían analizado positivamente la vacuna este jueves y se esperaba que la aprobación de la misma fuera inminente.
La primera vacuna en menos de 24 horas
El presidente estadounidense, Donald Trump, ha señalado que la primera vacuna se pondrá en menos de 24 horas en un video difundido desde su cuenta de Twitter.
No obstante, el Centro para Control y Prevención de Enfermedades debe autorizar aún el uso de las vacunas en la reunión que tendrá este sábado por la mañana, por lo que otros cálculos sitúan en el domingo y el lunes el comienzo de la vacunación en el país norteamericano.
Trump ha definido como un «milagro médico» y como «uno de los mayores logros científicos» el desarrollo de una vacuna en nueve meses en este mismo vídeo.
El mandatario ha asegurado que la pandemia terminará «pronto de una vez por todas», mientras que ha recalcado la seguridad de la vacuna y que no tiene efectos secundarios.
Los gobernadores de cada estado tienen autonomía para decidir dónde y cómo se aplicarán las vacunas, aunque Trump ha recalcado que será gratuita y que los trabajadores sanitarios y los ancianos serán vacunados en primer lugar.
Presiones previas
En las horas previas a la autorización de emergencia, varios medios estadounidenses publicaron que el jefe de gabinete de Trump, Mark Meadows, había llamado al comisionado de la FDA, Stephen Hahn, y le habría dicho que en caso de que no se aprobara la vacuna este viernes, debería «dimitir».
Hahn ha emitido un comunicado desmarcándose de esa «representación» de su conversación con Meadows, pero anteriormente había sido el propio Trump quien a través de Twitter había cargado contra el dirigente de la FDA.
Trump tildó a la organización de «gran, vieja y lenta tortuga» y pidió a Hahn que le diera «las malditas vacunas ahora». En ese mismo mensaje, también le instó a que «dejara de jugar a juegos y empezara a salvar vidas».
En cuanto a la llamada del jefe de gabinete, la Casa Blanca solo señaló que este tipo de conversaciones sobre el avance de la vacuna son habituales entre Gobierno y la FDA.
Una vacuna en lo peor de la pandemia
La vacuna ha llegado al país estadounidense cuando atraviesa su peor momento en la lucha contra la pandemia, ya que solo el pasado jueves el país registró 224,000 casos y 2,934 muertos.
Con la aprobación de emergencia, las 2.9 millones de dosis preparadas llegarán a 636 lugares seleccionados del país en las próximas 24 horas, según la cadena de televisión ABC News.
Hahn ha definido en un comunicado como un «hito» en la lucha contra la pandemia la aprobación de la vacuna, mientras que el consejero delegado de Pfizer, Albert Bourla, ha afirmado que «no podría estar más orgulloso» de los científicos involucrados en el proceso de investigación.