El crecimiento de Japón fue mejor de lo que se temía inicialmente en el primer trimestre, según datos oficiales publicados este lunes, pero la tercera economía del mundo sigue inmersa en una profunda recesión.
El Producto Interior Bruto (PIB) en el período enero-marzo cayó 0.6% en el trimestre, según una cifra revisada publicada el lunes por el gobierno, una contracción inferior a la primera estimación (-0.9%).
En ritmo interanual, el PIB japonés cayó 2.2% en el primer trimestre (frente al -3.4% en la primera estimación).
Estas cifras son menos malas que las anunciadas hace tres semanas, debido a un fuerte aumento de la inversión no residencial durante el período (+1.9% en el trimestre). Antes se anunció un retroceso de 0.5% en estas inversiones.
Sin embargo la tendencia sigue siendo negativa en otros componentes importantes del PIB, como el consumo de los hogares (-0.8%, mismo índice), la inversión pública (-0.6%, frente al -0.4% anteriormente) y las exportaciones (-6%, sin cambios).
La economía japonesa continúa en recesión técnica, porque su PIB ya cayó un 1.9% en el cuarto trimestre, incluso antes de la crisis del nuevo coronavirus.
Y las alarmas siguen encendidas para el segundo trimestre, en el que la caída del PIB de Japón se anuncia brutal, en un contexto de pandemia de coronavirus que obligó al gobierno a instaurar un estado de emergencia en abril-mayo.
El gobierno japonés ha desembolsado un plan récord de ayuda de 117 billones de yenes (casi 1 billón de euros, 1,1 billones de dólares) para apoyar a las empresas y los hogares, y prevé lanzar otro de la misma magnitud.
Estos planes representan casi el 40% del PIB anual de Japón. Pero una parte sustancial de la ayuda prevista consiste en préstamos.