No existe motivo para que se incremente el precio de la carne de pollo y el documento que ha circulado es un resumen técnico trabajado por el Ministerio de Economía, la Superintendencia de Administración Tributaria y la Secretaría de Integración Económica Centroamericana, que no cuenta con aprobación de las autoridades superiores.
En tales términos se expresó el ministro de Economía, Jorge Méndez, en un comunicado de prensa, a raíz de lo publicado en redes sociales y lo manifestado por algunas organizaciones sobre el supuesto incremento al arancel de importación de la carne de pollo.
El funcionario aseguró que los precios de dicho producto se han mantenido estables y de conformidad con lo acordado en el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos (CAFTA-DR), las importaciones de partes del pollo quedaron desgravadas a partir del 2006, a excepción de los cuadriles, si estas piezas se importaban fuera del «contingente arancelario».
Fuera de dicho contingente, el arancel que se aplica a la importación de cuadriles, que hasta el 2015 ha sido de 15%, se empezará a desgravar a partir del 2016, iniciando con 13.8% y se irá desgravando anualmente hasta llegar a cero por ciento en el 2023.
No obstante, si los cuadriles se importan dentro del contingente, dichas piezas se pueden importar con cero arancel acompañado de un certificado CA-PEQ[1], de acuerdo con lo negociado en el CAFTA DR, dijo.
A solicitud de la Superintendencia de Administración Tributaria se realizó un análisis técnico entre esta institución, el Ministerio de Economía y la Secretaría de Integración Económica Centroamericana, para revisar la clasificación de los cuadriles de pollo en el Sistema Arancelario Centroamericano.