La fiscalía suiza restituyó a la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) 36,6 millones de francos suizos (hacia 40 millones de dólares), confiscados a dos antiguos responsables imputados por corrupción en una de las múltiples investigaciones en torno a la FIFA, anunció este miércoles.
El paraguayo Nicolás Leoz, presidente de la Conmebol hasta 2013 y fallecido en agosto de 2019, así como el argentino Eduardo Deluca, antiguo secretario general de la instancia rectora del fútbol en Sudamérica durante 23 años, están acusados de «enriquecimiento ilícito (…) a costa de la Conmebol», recuerda la fiscalía helvética en un comunicado.
La justicia les reprocha haber percibido sobornos a cambio de la concesión de derechos de difusión televisiva de competiciones organizadas por la Conmebol, entre ellas la Copa América y la Copa Libertadores, unos hechos por los que fueron suspendidos de por vida de toda actividad ligada con el fútbol.
Nicolás Leoz, también antiguo vicepresidente de la FIFA y hombre de confianza de su antiguo dirigente Sepp Blatter, era asimismo objeto de una investigación estadounidense por presuntamente haber cobrado por favorecer la elección de los Mundiales de Rusia-2018 y Catar-2022, en detrimento de Estados Unidos e Inglaterra.
El ministerio fiscal, al cargo de una veintena de investigaciones desde 2015 sobre el fútbol mundial, confiscó desde diciembre de 2019 36,6 millones de francos suizos en cuentas en Suiza, restablecidos en tres pagos a la Conmebol: 16,1 millones en diciembre de 2019, 1,8 y 18,7 millones el pasado mes de septiembre.
La fiscalía cerró el proceso contra Nicolás Leoz tras la muerte del dirigente paraguayo. Eduardo Deluca, por su parte, fue condenado «por varios actos de gestión desleal». En septiembre, el ministerio público archivó una segunda investigación contra el argentino debido a un proceso ya abierto en su país por los mismos hechos.
Ambos hombres figuran entre los dirigentes sudamericanos en el centro del ‘Fifagate’ que estalló en 2015, un gigantesco escándalo de corrupción destapado a raíz de una investigación de Estados Unidos que desembocó, en 2018, en dos primeras condenas a penas de prisión contra el antiguo dirigente de la Federación Paraguaya y el antiguo presidente de la Confederación brasileña.
Objeto los dos de una orden de arresto internacional lanzada por la justicia estadounidense, Nicolás Leoz y Eduardo Deluca permanecieron en sus países; el primero fue puesto bajo arresto domiciliario por las autoridades paraguayas, y la justicia argentina rechazó la extradición del segundo.