Un juez salvadoreño condenó a 373 pandilleros o colaboradores de la Mara Salvatrucha (MS-13) a penas de entre cuatro y 60 años de cárcel por delitos graves como homicidios, conspiración y agrupaciones ilícitas, informaron este jueves fuentes judiciales.
El fiscal general, Raúl Melara, escribió en Twitter que «el resultado del juicio del caso Operación Cuscatlán es un éxito total», por cuanto sacaron de «circulación» a casi 400 pandilleros.
El juez absolvió, sin embargo, a 53 pandilleros.
Durante el juicio fue clave un testigo apodado «Noé», quien involucró a dirigentes políticos que en pasadas contiendas electorales se habían reunido con cabecillas de pandillas para obtener apoyo en el terreno.
La Fiscalía General de la República (FGR) consignó en Twitter que «las actividades fueron declaradas como propias del crimen organizado» y «se probaron delitos de homicidios, proposición y conspiración, y agrupaciones ilícitas».
Se estima que las pandillas en El Salvador tienen unos 70,000 miembros, de los cuales más de 17,000 están encarcelados. En su mayoría, pertenecen a la Mara Salvatrucha (MS-13) o a su rival, Barrio 18.
En 2018, El Salvador figuró como uno de los países sin guerra más violentos del mundo con un promedio anual de 51 homicidios por cada 100,000 habitantes.