‘Iota‘, degradada ya a depresión tropical, se encuentra en estos momentos sobre El Salvador, tras haber atravesado en los dos últimos días Nicaragua, donde tocó tierra como huracán de categoría 5 el lunes, y Honduras, además de haber arrasado la isla colombiana de Providencia, dejando tras de sí al menos una quincena de víctimas mortales.
De hecho, ya antes de entrar oficialmente en El Salvador, el temporal se cobró la vida este martes por la tarde de un moticiclista en el departamento de San Miguel, después de que le cayera una rama de un árbol arrancada por los fuertes vientos.
El deceso ha sido confirmado por el ministro de Gobernación y presidente de la Comisión de Protección Civil, Mario Durán, quien ha precisado que la víctima, de 30 años, iba con su hijo de año y medio en el momento del suceso.
Por su parte, el ministro de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Fernando López, ha advertido de que se prevén desbordamientos y deslizamientos de tierras como resultado de las lluvias que acompañan a ‘Iota’.
Asimismo, las autoridades han informado de que más de 800 personas ya han sido evacuadas a 230 albergues en todo el país y están preparados un total de 1,152 centros para acoger a quien lo necesita, según informa ‘La Prensa Gráfica’.
Nicaragua
En Nicaragua, la vicepresidenta, Rosario Murillo, confirmó el martes seis fallecidos, entre ellos dos menores, y casi 63,000 desplazados alojados en 683 refugios en todo el país.
La también esposa del presidente, Daniel Ortega, ha reconocido que el martes ha sido un día «difícil» y de «múltiples desafíos» pero «aprendimos, seguimos aprendiendo y sobre todo asumiendo nuestras responsabilidades de cara a las consecuencias desastrosas, catastróficas en términos materiales» que ha dejado ‘Iota’.
Ya este miércoles, el Gobierno ha informado de otros cuatro fallecidos en un deslizamiento de tierra que se ha producido en la comunidad de San Martín de las Peñas Blancas, en el departamento de Matagalpa.
De las 15 personas que habrían quedado sepultadas, durante la noche y este miércoles por la mañana se ha conseguido encontrar a cuatro con vida. En las labores de rescate están trabajando el Ejército y la Policía así como otros organismos.
Según informa el medio oficial ‘el19Digital’, las familias que se han visto afectadas por el deslizamiento, que ha recorrido alrededor de un kilómetro, habían recibido en los últimos años una propuesta para trasladarse a otro lugar al residir en una zona de riesgo pero se negaron a ello. Además, ante la llegada del huracán, también se les conminó a marcharse, pero optaron por quedarse.
Muertos en Colombia, Honduras y Panamá
Por otra parte, en Colombia, el presidente Iván Duque, ha decretado la situación de desastre en el departamento del archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina y sus cayos durante los próximos doce meses y prorrogable otro año más por los estragos causados por ‘Iota’, que ha dejado dos fallecidos.
La medida facilita al Gobierno el ofrecer asistencia de todo tipo a los damnificados así como habilitar albergues o ofrecer subsidios de arrendamiento temporal para las familias que han tenido que abandonar sus casas por el huracán.
Asimismo, el Ejecutivo se compromete con ello a la reconstrucción de las infraestructuras y a la reactivación económica, según informa Caracol Radio.
«Lamentamos reportar que dos personas fallecieron y una se encuentra desaparecida», indicó Duque durante su visita de este martes a la isla de Providencia, donde el 98 por ciento de la infraestructura se ha visto afectada. «Es la primera vez que un huracán categoría 5 golpea a nuestro país», destacó el mandatario.
En Honduras, donde ‘Iota’ golpeó ya como tormenta tropical, se ha registrado por ahora una única víctima mortal, una niña.
El Gobierno de Juan Orlando Hernández procedió al cierre de las principales carreteras del por miedo al desbordamiento de ríos e impuso evacuaciones obligatorias en algunos departamentos por los que iba a cruzar el fenómeno meteorológico.
Por otra parte en Panamá, donde aunque la tormenta no ha golpeado directamente sí que se han registrado fuertes lluvias y vientos, las autoridades informaron el martes de un muerto y un desaparecido en la comarca de Ngäbe Buglé. Igualmente, también se ha informado de cientos de viviendas afectadas.
Situación humanitaria
Entretanto, las organizaciones humanitarias siguen llamando la atención sobre el impacto que ‘Iota’ tendrá en la región después de que ya se viera afectada hace dos semanas por el paso del huracán ‘Eta’, dejando miles de desplazados que aún no habían podido regresar a sus casas.
«‘Iota’ dañó severamente la infraestructura productiva, instalaciones de salud, escuelas e impactó en el turismo, una importante fuente de ingresos para muchos. No tenemos reportes aún del impacto de Iota sobre las poblaciones indígenas en la costa Caribe de Centroamérica», explica José Nelson Chávez, asesor regional de emergencias de World Vision en Latinoamérica y el Caribe.
Chávez ha expresado su especial preocupación por las miles de personas alojadas en albergues temporales. «La evacuación masiva de millares, el limitado acceso a agua potable y el potencial hacinamiento amenaza a miles de familias de contagiarse de la COVID-19″, ha incidido en un comunicado.
Según el asesor de World Vision, «las dificultades en esos centros temporales ya están causando incluso incidentes de violencia contra los niños y niñas». «El sufrimiento de las familias causado por la pérdida de sus hogares, cultivos y animales es más duro todavía, cuando añadimos el riesgo de enfermarse», ha incidido.
Por su parte Vittoria Peñalba, directora de sostenibilidad de World Vision en Nicaragua, ha resaltado que las familias en Bilwi, en la costa caribeña de Nicaragua, una de las zonas más afectadas, «están en shock, muy vulnerables y experimentando muchas necesidades».
«Los equipos de respuesta se encuentran agotados, porque están lidiando con los efectos que dejó ‘Eta’ y ahora están ya atendiendo los estragos del huracán ‘Iota’, que aún no se cuantifican, porque las lluvias y los vientos son muy fuertes en la zona del Caribe», ha explicado.