Durante una citación en el Congreso de la República, los directores de los hospitales de Villa Nueva y Parque de la Industria confirmaron que esos recintos están “al límite”, y que ya no estarán recibiendo más personas infectadas con coronavirus, debido a la falta de personal y a la lentitud en el traslado de recursos por parte del Ministerio de Salud Pública.
Julio Hernández, director del Hospital de Villa Nueva dijo: “No podemos recibir pacientes”, mientras que la directora del Hospital del Parque de la industria, Daniela Hernández, afirmó. “No puedo recibir más”, esto ante el cuestionamiento por parte de los diputados de la bancada Unidad Nacional de la Esperanza (UNE).
En varias declaraciones a la prensa, el presidente Alejandro Giammattei ha insistido en decir que el Hospital del Parque de la Industria es el mejor equipado para atender emergencias y casos críticos, pero en la reunión se indicó que, en efecto, existen 25 respiradores, pero no están en uso por dos causas: no hay médicos y existen algunos problemas en la instalación.
El encargado de los hospitales, el viceministro Germán Scheel, indicó que ante el colapso de estos dos centros hospitalarios, tratarán de resolver el problema con enviar a los pacientes asintomáticos a hoteles y así liberar espacio. En cuanto a la ausencia de personal médico agregó que no cuentan con profesionales que quieran ir a trabajar a los dos centros.
La situación es similar en el Instituto Guatemalteco de Seguridad Social, la gerente de la entidad, Ana Marilyn Ortiz, aseguró que registran 233 pacientes con COVID-19 por lo que no pueden recibir más.
Baja ejecución
Los parlamentarios también cuestionaron al viceministro Scheel por la baja ejecución presupuestaria de la cartera de Salud, la cual no supera el 1 por ciento de los Q1.4 millardos asignados para atender la emergencia provocada por la pandemia. “Es una calamidad que no ejecuten esos recursos”, indicó el jefe de bancada Carlos Barreda.
En su defensa, el viceministro indicó que la ejecución va lenta, debido a que las unidades ejecutoras no han comprados por problemas de sobrevaloración en los insumos a necesitar.