Hong Kong anunció este martes que cerrará lugares públicos como estadios, museos y piscinas, para hacer frente a la propagación del nuevo coronavirus que ya provocó la muerte de 106 personas en China.
Todos los lugares de ocio serán cerrados a partir del miércoles para evitar «las reuniones de personas», indicaron las autoridades, que el sábado decretaron el estado de emergencia máximo en todo el territorio de Hong Kong.
Hasta ahora, la excolonia británica registró ocho casos de virus, seis de ellos en personas que vinieron de la China continental en tren.
Todas las salas y canchas de deporte, las piscinas públicas, las playas, los centros de vacaciones y los establecimientos culturales, como los museos, permanecerán cerrados hasta nuevo aviso, anunció un comunicado oficial.
Las escuelas y universidades, actualmente cerradas debido a las vacaciones del Año Nuevo chino, permanecerán cerradas hasta el 17 de febrero.
Desde el lunes, todos los habitantes de la provincia de Hubei, epicentro de la epidemia, y todas las personas que la visitaron durante las dos últimas semanas, tienen prohibida la entrada en Hong Kong.