En el Índice de Progreso Social 2016, donde se evalúan a 133 países, Guatemala retrocedió del puesto 79 que tuvo el año pasado al 87, está evaluación se enfoca en tres dimensiones: necesidades básicas humanas, fundamentos del bienestar y oportunidades.
Los factores que incidieron en la caída fueron la deteriorada evaluación en corrupción, derivado de los casos destapados el año pasado, así como la crisis en el sistema de salud y un aceleramiento en la mejora mostrada por países que tenían una nota similar a Guatemala, explicó Macarena Corlazzoli, Project manager del Instituto de Progreso Social.
La nota exacta que tuvo Guatemala es de 61.68 puntos frente a los 62.19 unidades de 2015 y de 61.37 en 2014. El indicador está construido con base en 52 indicadores sobre tres dimensiones: necesidades básicas humanas, fundamentos del bienestar y oportunidades. Referente a la escala que se maneja es de 0 (mal) a 100 (lo ideal).
En las necesidades básicas humanas se analizan variables relativas a nutrición y cuidados médicos básicos, agua y saneamiento, vivienda y seguridad personal; por su parte fundamentos del bienestar se considera el acceso a conocimientos básicos, acceso a información y comunicaciones, salud y bienestar y calidad medioambiental.
El tercer eje, denominado oportunidades, se estudia la situación de los derechos personales, libertad personal y de elección, tolerancia e inclusión y acceso a educación superior.