El presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, endureció este domingo las medidas contra el nuevo coronavirus al prohibir otra vez la circulación entre las diferentes regiones y extender el toque de queda parcial, en momentos en que el país centroamericano supera los mil casos.
Tras un aumento de contagios y la «percepción de cierto relajamiento social» en «algunos sectores», Giammattei dijo en cadena nacional que durante la siguiente semana se volverá a restringir la movilidad entre los 22 departamentos guatemaltecos para contener la propagación del virus.
La restricción fue impuesta desde la festividad de Semana Santa en abril y el domingo pasado había quedado sin efecto por orden de Giammattei, con excepción de los departamentos de Guatemala (centro), Sacatepequez, Chimaltenango (oeste), El Progreso y Zacapa (ambas al este), donde están la mayoría de contagiados.
Este domingo, Guatemala registró 85 nuevos casos de contagio de la COVID-19, la cifra diaria más alta desde que se reportó el primer caso hace dos meses. Con ello, suma 1,052 personas positivas a la enfermedad, entre ellas 26 muertas y 110 recuperadas.
El gobernante guatemalteco también prolongó por una semana el toque de queda vigente desde el 22 de marzo, aplicado desde las 18H00 (00H00 GMT) a las 04H00 del día siguiente. Más de 15,000 personas han sido arrestadas por violar la orden.
Giammattei advirtió en su mensaje con el cierre y sanciones a mercados y centros comerciales que no cumplan con las medidas de higiene y distanciamiento social.
Agregó que se mantendrán vigentes otras medidas adoptadas desde marzo para contener la propagación del virus, principalmente la prohibición al transporte público, eventos masivos y el cierre de las fronteras a extranjeros.
El uso obligatorio de mascarilla y la venta restringida de bebidas alcohólicas también continuarán con riesgo de multa a quienes infrinjan la disposición.