Guatemala ante su prueba decisiva: dos finales por el sueño mundialista

  • La selección de Guatemala entra en la recta más intensa de su camino rumbo a la Copa del Mundo 2026. Bajo el mando del mexicano Luis Fernando Tena, la Bicolor afronta dos partidos que pueden definir todo su proceso.

Con 5 puntos en el Grupo A, Guatemala ocupa el tercer lugar, apenas a un punto de Panamá (6) y Surinam (6). La diferencia de goles, además, convierte cada encuentro en una batalla no solo de puntos, sino de eficacia ofensiva.

Guatemala llora la derrota de local contra El Salvador y no haber podido sostener la victoria en Surinam ya que sobre la hora el equipo local igualó de forma agónica y evitó que los nacionales tuvieran más comodidad en la tabla.

Un reto de madurez y continuidad

El proceso de Tena ha significado estabilidad y evolución táctica. El técnico ha logrado consolidar una estructura sólida, basada en una defensa ordenada y una circulación más limpia del balón. Sin embargo, el déficit sigue siendo el gol: Guatemala genera juego, pero carece de contundencia en los últimos metros.

El duelo ante Panamá se presenta como el más exigente del grupo: los canaleros combinan experiencia mundialista con una plantilla físicamente potente. Tena deberá apostar por equilibrio, no ceder espacios en el mediocampo y aprovechar la velocidad de jugadores como Rubio Rubín y  Óscar Santis.

El segundo partido, ante Surinam, tendrá un contexto distinto. Guatemala será local y necesitará asumir la iniciativa. El Estadio Manuel Felipe Carrera “El Trébol” volverá a ser un hervidero de apoyo, pero también un escenario de presión. Ganar ahí no solo es una obligación matemática: es una cuestión de orgullo y validación del proceso de Tena.

Claves tácticas para Guatemala

Presión media e intensidad controlada: Tena no suele apostar por presionar alto desde el minuto uno; su enfoque es mantener el bloque compacto y cerrar líneas de pase interiores.

Transiciones rápidas: Guatemala ha mejorado su salida con balón, pero necesita precisión al momento de conectar mediocampo y ataque.

Balones detenidos: Ante selecciones más físicas, la pelota parada puede ser decisiva.

Lo que está en juego

Si Guatemala logra sumar al menos cuatro puntos en esta doble fecha, se colocaría en posición inmejorable para clasificar a la siguiente ronda. Pero más allá de los números, lo que se disputa es la credibilidad del proyecto Tena: un trabajo de casi tres años que ha devuelto competitividad y orden a la selección chapina.

El técnico ha insistido en la calma, pero sabe que estos dos partidos pueden marcar un antes y un después. La Bicolor tiene la oportunidad de demostrar que el fútbol guatemalteco está listo para dar el salto que por décadas se ha resistido: competir con madurez en la antesala de un Mundial.