- El grupo narcoparamilitar ha comenzado un ‘paro armado’ como represalia a la extradición de ‘Otoniel’
El Alto Comisionado para la Paz de Colombia, Juan Camilo Restrepo, ha pedido a los miembros del grupo narcoparamilitar Clan del Golfo que se sometan a la justicia, después de la extradición a Estados Unidos del que fuera su líder, Darío Antonio Úsuga David, alias ‘Otoniel’ (foto arriba) que ha llevado a la organización a iniciar un ‘paro armado’ como represalia.
Restrepo ha recordado que los miembros del Clan del Golfo pueden presentarse de manera voluntaria e individual ante una autoridad civil o militar para someterse a la Justicia y abandonar de manera definitiva cualquier acto de criminalidad, lo que les reporta beneficios jurídicos y socioeconómicos, ha recogido Caracol Radio.
«Estas personas sólo tienen tres caminos: enfrentarse la institucionalidad y ser dados de baja, ser capturados o acceder al sometimiento, a través de la Ruta de la Legalidad», ha señalado el Alto Comisionado para la Paz, que ha detallado que, durante el Gobierno de Iván Duque, más de 250 integrantes del Clan del Golfo han elegido esta opción y se ha reintegrado en la vida social.
Los beneficios previstos en el decreto no sólo se aplican al integrante del grupo, sino también a su grupo familiar –esposa, hijos o padres–.
El Clan del Golfo ha comenzado en varias localidades de Colombia un ‘paro armado’ como consecuencia de la extradición de ‘Otoniel’ a Estados Unidos. Según la información recogida por el citado medio, en localidades han aparecido panfletos intimidatorios, viviendas pintadas con grafitis alusivos a las Autodefensas Gaitanistas de Colombia o vehículos quemados, entre otros actos. Las acciones violentas aumentan con el paso de las horas y está previsto que el paro dure varios días.
Considerado durante años como el principal jefe de la droga en Colombia, ‘Otoniel’, fue detenido en octubre de 2021. Desde entonces ha estado intentando desesperadamente evitar su extradición a Estados Unidos, donde será juzgado por delitos relacionados con el narcotráfico, a través de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), uno de los mecanismos de la Justicia para tratar el conflicto armado.
Actualmente el Clan del Golfo está formado por unos 3.250 hombres y mujeres, repartidos en cuatro estructuras principales que a su vez se dividen en 22 subestructuras repartidas en doce departamentos.