La Conmebol autorizó a los clubes participantes de la edición 2020 de la Copa Libertadores a inscribir a jugadores de otros equipos que quedaron eliminados en las fases previas del certamen continental.
Además, un futbolista inscripto en la fase de grupos en un equipo podrá reforzar otro club a partir de octavos de final.
El cambio reglamentario para el refuerzo de los equipos ha sido uno de los principales reclamos de los entrenadores en los últimos años.
En base al «criterio de elegibilidad», la nueva disposición reglamentaria de la entidad matriz del fútbol sudamericano prohíbe sin embargo que el jugador vuelva a su club de origen.
La modificación se extiende a la incorporación de jugadores. Se podrán realizar cinco variantes en las listas de buena fe en octavos, dos en cuartos y semifinales.
En la final ya no se admiten cambios en la lista de disponibles.
No obstante, se podrá cambiar al arquero en caso de lesión, extensiva a cualquier instancia de la Copa Libertadores, agregó la Conmebol.