Talibanes y negociadores estadounidenses concluyeron el domingo por la noche su último ciclo de conversaciones, declaró el lunes un portavoz de los insurgentes, en vistas a un acuerdo que permitiría a Estados Unidos reducir su presencia militar en Afganistán.
Según Zabihullah Mujahid, el octavo ciclo de discusiones iniciado el sábado pasado en Doha acabó después de medianoche. «El trabajo ha sido tediosas aunque efectivas. Las dos partes han convenido consultar a sus respectivos dirigentes para las etapas siguientes», escribió en Twitter. La embajada de Estados Unidos en Kabul no se había pronunciado el lunes.
Las especulaciones eran positivas en los últimos días en Kabul sobre la inminencia de un acuerdo. El portavoz de los talibanes sugirió en un tuit el domingo que las negociaciones continuarían, ya que los insurgentes querían «redactar meticulosamente y preparar el anuncio de todos los artículos a la luz de los intereses islámicos y nacionales».
Washington espera concluir un acuerdo de paz con los talibanes antes de las elecciones presidenciales afganas del 28 de septiembre, y de las presidenciales en Estados Unidos en 2020.
La propuesta de acuerdo que está sobre la mesa prevé reducir el número de soldados estadounidenses en Afganistán de 14.000 a 8.000; a cambio, los talibanes respetarían un alto el fuego, romperían lazos con Al Qaida y negociarían con la administración de Kabul un acuerdo de paz duradero.
El lunes, los servicios de inteligencia afganos anunciaron la liberación de 35 prisioneros talibanes «un signo claro de la firme voluntad del gobierno para la paz y el fin de la guerra».