En un ambiente de liberación y euforia, miles de viajeros se apresuraban este miércoles a abandonar Wuhan, ciudad china donde surgió la pandemia de la covid-19, tras levantarse un encierro de dos meses y medio.
A medianoche, terminó la cuarentena impuesta desde el 23 de enero a los 11 millones de habitantes de la capital de la provincia de Hubei, y miles de pasajeros empezaron a tomar por asalto estaciones de autobuses y ferroviarias, algunos de ellos con atuendos de protección integral.
Hao Mei, oriunda de Enshi, una ciudad a 450 km al oeste de Wuahn, explica que tuvo que dejar solos a sus dos hijos durante más de dos meses, ya que quedó atrapada a fines de enero en Wuhan, donde trabaja en una cantina escolar.
«Me he levantado a las cuatro hoy. ¡Me siento tan bien»!», exclama esta mujer de 39 años, antes de subirse a un tren.
«Al principio, lloraba cada noche. Me sentía mal, porque mi hija es aún muy joven. Tiene apenas diez años», dijo.
Las autoridades consideran que unas 55,000 personas abandonarán este miércoles Wuhan en tren.
Innumerables automóviles y buses atravesaban los peajes en los límites de la ciudad tras levantarse los controles de carretera, constató la AFP.
Wuhan es de lejos el lugar más golpeado en China por la epidemia. Cerca de 2,500 personas murieron en esta ciudad, del total de más de 3.330 fallecimientos oficialmente registrados en todo el país.
Esta ciudad, donde apareció el nuevo coronavirus a fines de 2019, ha sido la primera del mundo en sufrir un draconiano aislamiento con todos sus habitantes confinados.
‘Ciudad de héroes’
Foto AFP / Str Una fila de coches en un peaje de una autopista para salir de la ciudad china de Wuhan.
Las autoridades sanitarias consideran que un mercado de Wuhan, donde se vendían animales vivos exóticos, fue el foco de la transmisión del virus al hombre.
El resto de la provincia de Hubei, de la que es capital Wuhan, también fue puesta en cuarentena de fines de enero a fines de marzo, afectando a decenas de millones de personas.
Con la propagación del virus a todo el mundo, varios países adoptaron medidas similares. Hoy, la mitad de la humanidad está de una manera u otra confinada.
En Wuhan, la cuarentena parece haber dado resultados, tras una espectacular reducción en las últimas semanas de los casos de contaminación y de muertes en China.
El martes, China anunció por primera vez cero muertos por el nuevo coronavirus desde que surgió la pandemia de covid-19.
Sin embargo, existen dudas sobre la fiabilidad de las cifras oficiales de muertos.
Foto: AFP / Héctor Retamal Una trabajadora del aeropuerto de Tianhe, en la ciudad de Wuhan, luce una mascarilla con la bandera de China.
Varias familias han indicado que personas muertas en sus domicilios no han sido contabilizadas, o no fueron sometidas a análisis al principio de la epidemia, cuando los hospitales estaban desbordados.
«Wuhan merece ser llamada una ciudad de héroes», proclamaba un mensaje divulgado el miércoles en una estación de la ciudad.
«Los habitantes de Wuhan han pagado un elevado precio», declara a la AFP Yao, un joven de 21 años, que embarca en tren hacia Shanghai (este), donde trabaja en un restaurante. «Nos alegra que se levante el encierro»
Código verde
En una estación, un robot circula en medio de la muchedumbre de pasajeros, pulverizando desinfectante a sus pies, mientras emite un mensaje grabado en el que se insta a todos a portar mascarilla.
Los pasajeros deben someterse a controles de temperatura y mostrar en su smartphone un código QR verde. Éste es entregado por las autoridades y permite demostrar que no se está contaminado por el covid-19 ni se reside en un barrio considerado aún de alto riesgo.
Foto: AFP / Héctor Retamal Una sanitaria de la provincia china de Jilin abraza a unas enfermeras de Wuhan con las que ha trabajado para frenar la pandemia de coronavirus COVID-19 antes de partir del reabierto aeropuerto de Tianhe el 8 de abril.
El aeropuerto de la ciudad también ha reanudado su actividad.
La prensa china saludaba de forma unánime el levantamiento de la cuarentena. Con un titular recurrente: «Wuhan, feliz de volverte a ver después de todo este tiempo».
Pero, pese al levantamiento del bloqueo, el retorno a la normalidad no será inmediato.
Se mantendrán diversas restricciones para evitar una segunda oleada epidémica. Las escuelas siguen cerradas. Y se insta a los habitantes a no dejar la ciudad, y ni siquiera sus domicilios. Además, ante los temores que generan los habitantes de Wuhan en otros lugares del país, quienes quieran irse deberán someterse en varios casos a una cuarentena de 14 días en su ciudad de destino.