El suizo Roger Federer, seis veces ganador del Abierto de Australia, sobrevivió a un épico partido de cinco sets, este viernes en Melbourne, para clasificar a octavos de final de primer torneo del año del Grand Slam, logrando su victoria número cien en el mismo.
Federer pudo al final ganar en un duro súper tie-break en el quinto y último set al australiano John Millman, al que derrotó por 4-6, 7-6 (7/2), 6-4, 4-6 y 7-6 (10/8), tras cuatro horas y tres minutos de combate, para seguir en camino hacia un hipotético 21º título de Grand Slam en su carrera.
El suizo de 38 años estuvo perdiendo en el súper tie-break hasta 4-8, pero a dos puntos de la derrota, encadenó seis para ganar el partido.
El número tres mundial, que había perdido con Millman en el único partido jugado entre ambos anteriormente en un Grand Slam, en octavos de final del US Open 2018, cometió un gran número de errores no forzados: 82 en total.
Federer se enfrentará en octavos al húngaro Marton Fucsovics (67º).
«Fue duro. Gracias a Dios que había un súper tie-break. Si no, hubiera perdido. Él jugó un gran partido. Casi ni puedo hablar. Me costó crearle problemas en su servicio, ya que estaba haciendo un buen trabajo sin cometer errores. Nunca me encontré cómodo en el partido», relató Federer tras su triunfo.
«Comenzaba a pensar en la forma en que la que iba a hablar de mi derrota en rueda de prensa», confesó.
La victoria no solo le dio su triunfo número cien en Melbourne Park, sino además la distinción de ser el único jugador, hombre o mujer, en ser centenario en ese aspecto en dos torneos diferentes del Grand Slam.
El suizo logró ese récord también en Wimbledon el año pasado, uniéndose a un círculo cerrado de cuatro tenistas que lo han conseguido, junto a las estadounidenses Martina Navratilova en Wimbledon, y Chris Evert y Serena Williams en el US Open.