España logró su segundo título europeo de balonmano masculino al derrotar a Croacia por 22-20, este domingo en Estocolmo, y se aseguró su presencia en los Juegos de Tokio-2020, tras un gran partido de su portero Gonzalo Pérez de Vargas.
Los Hispanos conservaron el título ganado hace dos años, en el Europeo de Croacia-2018, y vuelven a la cita olímpica, después de no haber podido clasificar a Rio-2016, en la que era su primera ausencia en cuarenta años, desde Montreal-76.
Junto al portero del Barcelona, que realizó un total de 18 paradas, la otra estrella de la selección española fue Aleix Gómez Abello, que marcó cinco tantos en cinco intentos, con un efectividad desde los siete metros del cien por cien, siendo el goleador de su equipo.
El joven extremo del Barcelona, de 22 años, tomó la responsabilidad del lanzamiento de un penal, a falta de poco más de un minuto, con 20-20 en el marcador, que pondría a su equipo en ruta hacia el título.
Con el partido casi decidido, Alex Dujshebaev pondría en un contragolpe el marcador definitivo de 22-20.
España, que había perdido cuatro finales continentales, se ha tomado la revancha ganando las dos últimas.
El conjunto dirigido por Jordi Ribera empezó mal el partido, sin ideas frente a un dura defensa croata que fue siempre por delante en el marcador en los primeros minutos, hasta tener una ventaja de los balcánicos de 10-7 en el minuto 18.
Pero ahí surgió la figura del portero español Gonzalo Pérez de Vargas, que sustituyó a Rodrigo Corrales, y encadenó una serie de paradas que permitieron la remontada española hasta llegar al descanso con una ventaja para los ibéricos de 12-11.
– Pérez de Vargas brillante –
El portero español siguió su buen tono al inicio de la segunda mitad. Sus paradas y una serie de contragolpes permitieron al combinado de Jordi Ribera alcanzar una máxima ventaja de 16-12.
Tras esa cómoda ventaja, España se relajó y estuvo más de ocho minutos sin marcar, lo que aprovechó Croacia para acercarse en el marcador hasta 16-15.
La crisis de juego de la selección española continuó y permitió a Croacia empatar a doce minutos del final 18-18.
Aprovechando la poca efectividad de España, que no sabía cómo superar la férrea defensa croata, los balcánicos se pusieron en ventaja de 19-18 a poco más de seis minutos para terminar.
Pero España logró empatar de penal (19-19), aunque la exclusión por dos minutos de Raúl Entrerríos, a falta de cuatro, dificultó las cosas para el equipo de Ribera.
Pero en esos últimos minutos, España recuperó la lucidez que le había faltado en casi todo el segundo tiempo y cuando seguía el empate 20-20, buscó a su pívot, Julen Aguinagalde, al que los croatas hicieron penal.
El joven Gómez Abello tomó la responsabilidad del lanzamiento de los siete metros, que ponía a España rumbo al título.
El buen partido de Pérez de Vargas y Gómez Abello se vio acompañado de la efectividad de Jorge Maqueda y Raúl Entrerríos, con tres tantos cada uno.
Maqueda fue clave en los minutos finales del primer tiempo, cuando España iba perdiendo por 10-7 y devolvió a su equipo al partido con sus goles.