- Los bomberos en el área de Los Ángeles luchan por controlar otros tres grandes incendios que mataron a cinco personas y pusieron a 130.000 personas bajo órdenes de evacuación.
Voz de América
Associated Press (AP)
LOS ÁNGELES — Un incendio de rápida propagación estalló en Hollywood Hills el miércoles por la noche, amenazando uno de los lugares más emblemáticos de Los Ángeles mientras los bomberos luchaban por controlar otros tres grandes incendios que mataron a cinco personas, pusieron a 130.000 personas bajo órdenes de evacuación y devastaron comunidades desde la costa del Pacífico hasta el interior de Pasadena.
El incendio Sunset comenzó el miércoles por la noche mientras las autoridades realizaban una conferencia de prensa para informar a los residentes sobre los esfuerzos para combatir los incendios masivos en Pacific Palisades y Altadena y advertir que el peligro de incendio seguía siendo alto. La jefa del Departamento de Bomberos de Los Ángeles, Kristin Crowley, salió apresuradamente después de anunciar el nuevo incendio y poco después de que se emitiera una orden de evacuación.
El Paseo de la Fama de Hollywood estaba lleno de gente y las calles alrededor del Teatro Chino TCL y el Museo Madame Tussauds estaban repletas de tráfico intermitente mientras las sirenas sonaban y los helicópteros volaban a baja altura para arrojar agua sobre las llamas, que estaban a solo una milla de distancia. La gente salía de los hoteles cargando maletas mientras algunos espectadores caminaban hacia las llamas, grabando el incendio con sus teléfonos.
En pocas horas, los bomberos habían logrado un gran progreso. El capitán del Departamento de Bomberos de Los Ángeles, Erik Scott, dijo que pudieron mantener el fuego bajo control porque «lo atacamos con fuerza y rapidez y la madre naturaleza fue un poco más amable con nosotros hoy que ayer».
Un día antes, vientos con fuerza de huracán soplaron brasas por el aire, encendiendo cuadra tras cuadra en el vecindario costero de Pacific Palisades, así como en Altadena, una comunidad cerca de Pasadena que está a unas 25 millas (40 kilómetros) al este.
Casi 2.000 casas, negocios y otras estructuras han sido destruidas en esos incendios, llamados incendios de Palisades y Eaton, y se espera que el número aumente. Las cinco muertes registradas hasta ahora fueron del incendio de Eaton.
El incendio de Palisades ya es el más destructivo en la historia de Los Ángeles, con al menos 1.000 estructuras quemadas. Más de media docena de escuelas en el área resultaron dañadas o destruidas, incluida Palisades Charter High School, que ha aparecido en muchas producciones de Hollywood, incluida la película de terror de 1976 «Carrie» y la serie de televisión «Teen Wolf», dijeron las autoridades. UCLA ha cancelado las clases para la semana.
La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, dijo que las operaciones aéreas estaban apagando las llamas. Advirtió que todavía enfrentaban «vientos erráticos», aunque no como el martes por la noche, cuando los aviones tuvieron que permanecer en tierra y se produjo gran parte de la destrucción.
En Pasadena, el jefe de bomberos Chad Augustin dijo que el sistema de agua de la ciudad estaba sobrecargado y se vio obstaculizado aún más por los cortes de energía, pero incluso sin esos problemas, los bomberos no habrían podido detener el incendio debido a los intensos vientos que avivaron las llamas.
«Esas ráfagas de viento erráticas arrojaban brasas a varios kilómetros por delante del incendio», dijo.
Mientras las llamas avanzaban por su vecindario, José Velásquez roció con agua la casa de su familia en Altadena mientras las brasas caían sobre el techo. Consiguió salvar su casa, que también alberga el negocio familiar de venta de churros, un dulce mexicano. Otros no tuvieron tanta suerte. Muchos de sus vecinos estaban en el trabajo cuando perdieron sus casas.
“Así que tuvimos que llamar a algunas personas y luego tuvimos mensajes de otras personas preguntando si su casa todavía estaba en pie”, dijo. “Tuvimos que decirles que no”.
En Pacific Palisades, una zona de ladera a lo largo de la costa salpicada de casas de celebridades, el alcance de la destrucción estaba empezando a quedar claro:
Bloque tras bloque de casas y bungalows de estilo Misión de California quedaron reducidos a restos carbonizados. Una barandilla de hierro ornamentada envolvía el armazón humeante de una casa. Las piscinas estaban ennegrecidas por el hollín y los coches deportivos se desplomaban sobre neumáticos derretidos.
Las escenas apocalípticas se extendieron por kilómetros.