Pocas horas antes de la prohibición de todas las reuniones en Nueva York, un puñado de personas, lejos el uno del otro, se reunieron para celebrar una increíble boda al aire libre en un barrio ortodoxo en Brooklyn.
En esta calle de Crown Heights, una pareja, debajo de un dosel de boda judía, tuvo que dejar algunas tradiciones de lado para poder casarse, a pesar de todo.
«Ha sido una semana loca», dijo el novio JJ Deitch, sosteniendo la mano de su esposa Fraida.
Después de la ceremonia, la pareja subió a un descapotable y se dirigió hacia la calle, seguida de una línea de vehículos en la que se encontraban los invitados, algunos con máscara.
Los habitantes del distrito saludaron a la procesión y siguieron a los autos con la mirada desde sus balcones.
«Les dimos a todos una razón para celebrar, y fue fantástico», dijo el novio. «Parece que fue un muy buen momento para mucha gente».
A pesar de haber optado por llevar a cabo la boda, la pareja y sus familias deseaban respetar, en la medida de lo posible, las instrucciones dadas por las autoridades en materia de distanciamiento social.
De 500 personas hace una semana, el límite de reunión bajó a 50, antes de que el gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo, anunciara el viernes que cualquier reunión estaría prohibida a partir del domingo.