El presidente de Francia, Emmanuel Macron, se pronunció por el “cobarde” asesinato del ciudadano francés Benoît Maria, quien fue atacado ayer en una comunicad de Quiché.
El mandatario resaltó que durante 20 años, María lideró proyectos agrícolas en beneficio de las comunidades indígenas mayas, ayudándolas a preservar sus tierras. “Saludo su compromiso humanista, fraterno y solidario que honra Francia”, escribió el gobernante en un mensaje publicado en su cuenta de twitter.
María, director en Guatemala de Agrónomos y Veterinarios Sin Fronteras (AVSF), fue asesinado a tiros el lunes cuando conducía una camioneta en un camino rural del poblado indígena de San Antonio Ilotenango, Quiché.
El director general de la ONG, Frédéric Apollin, explicó a la AFP que no tenía conocimiento sobre alguna amenaza contra el activista.
“El trabajo en la tierra en Guatemala es delicado, pero no podemos hablar de amenaza. No había, que sepamos, ninguna que pesara sobre nuestra asociación o sobre Benoît que se encontraba en el lugar incorrecto en el momento incorrecto”, dijo Apollin.
El vicepresidente de Guatemala, Guillermo Castillo, también demandó este martes a la justicia esclarecer la muerte del activista francés Benoît María.
“Es imperante que las instituciones correspondientes esclarezcan este hecho de violencia y otros que se han registrado contra defensores de derechos humanos”, señaló Castillo en un comunicado.
Expresó su solidaridad con la familia y compañeros del activista que murió “en un lamentable hecho de violencia”, agregó el texto.
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Jorge Santos, coordinador de la Unidad de Protección a Defensoras y Defensores de Derechos Humanos de Guatemala (Udefegua), indicó que María llevaba más de dos décadas en Guatemala donde residía y apoyaba proyectos agrícolas para las comunidades indígenas mayas-ixiles.
María “dedicó gran parte de su vida a promover el desarrollo comunitario en favor de las poblaciones en condiciones de vulnerabilidad”, agregó el vicepresidente guatemalteco.
Udefegua registró entre enero y abril pasados al menos 157 agresiones a activistas en el país centroamericano, mientras que en 2019 documentó 462, entre ellas 15 asesinatos.