El Real Madrid logró un triunfo convincente ante el Celta de Vigo (2-0) en el estreno de 2021 con motivo de la jornada 17 en la Liga Santander gracias al acierto de Lucas Vázquez y Marco Asensio, que se intercambiaron los papeles en ambos goles, y permiten olvidar el tropiezo ante el Elche que empañó el final de año.
Los de Zinédine Zidane no echaron de menos a Sergio Ramos, demostraron su fiabilidad ante equipos alegres, que le sientan mucho mejor, y asestó la cornada definitiva cuando se lesionó Iago Aspas. Cuando se fue el ‘Príncipe de las bateas’ se acabó lo que se daba para los olívicos, más aseados y atrevidos desde la llegada de Eduardo Coudet al banquillo.
Los blancos tardaron muy poco en abrir el marcador y poner la empresa de cara cuando Asensio, que llevaba varios partidos rondando el gol, se convirtió en arquitecto del 1-0 con un centro preciso desde la banda izquierda que remató Lucas Vázquez con la cabeza. La jugada del balear fue un premio a su mejoría reciente y el testarazo del gallego, también.
El gol dio alas a un Real Madrid que sufrió algún susto de los celestes con un remate de Santi Mina o la incisiva presión de Iago Aspas, el mejor tesoro de un equipo que respira al son del de Moaña. Justo, en la misma jugada al primer tanto de los locales, el internacional del Celta no pudo acertar en un mano a mano con Courtois. En un santiamén la película cambió por completo.
Su repentina lesión al comienzo de la segunda mitad modificó el guión de los vigueses, que bajaron revoluciones y se dejaron engullir por el fútbol más vertical del Real Madrid. Benzema abriendo espacios y Modric recuperando balones como hace unos años. La mejor versión salió a la luz y el Celta lo pagó con el 2-0 a los diez minutos de la reanudación.
Modric cortó una contra de los visitantes, Casemiro prolongó a Lucas Vázquez y el de Curtis le regaló el cuero a Marco Asensio, que no falló y rompió su mala racha esta temporada. El primer gol del mallorquín, que sonrió como llevaba tiempo sin hacerlo y estampó la sentencia para poner calma en la fase final del encuentro.
Benzema perdonó el tercero a media hora para el final y también en el ’90, segundos antes de dar el relevo a Mariano, pero también el Celta pudo haber maquillado el electrónico con un remate de Baeza en el tiempo de descuento. Pero Nacho, que cuajó un partido sobresaliente, impidió el gol del conjunto gallego y cerró un triunfo merecido para un Real Madrid que vuelve a la punta de la tabla.
Aunque se trata de un liderato provisional y cogido con pinzas. Los de Zidane son líderes con tres partidos más que el Atlético, una buena forma de comenzar el año y recordar a su vecino que seguirán en la pelea. El Celta, por su parte, pone fin a su racha de seis jornadas sin perder, pero seguirá viviendo en la octava posición, a tres puntos de la zona europea.