- Los de Ancelotti buscan recuperar sensaciones tras derrotas que lo tienen al borde de una crisis. La copa les esquiva desde el 2014.
El Real Madrid ha entrado en un barreno que hoy intentará detener frente al Villarreal, luego de tres derrotas en los últimos cinco juegos, que le han llevado a perder la Supercopa de España y retrasarse en LaLiga a tres pintos de su último victimario, el Barcelona F.C. que, por el contrario muestra su mejor nivel de juego en este momento.
Aunque Ancelotti se muestra confiado en el inicio de «un nuevo ciclo», arrastra varias lesiones que se suman al bajó de juego de jugadores como Luka Modric, Vinicus y, en particular, una defensa vulnerable en todos sus flancos.
Las lesiones agravan la situación de la maltrecha defensa, pues no llegan al partido de hoy Alaba, Carvajal, Tchouaméni ni Lucas Vasquez, por lo que Ancelotti tendrá que improvisas y seguramente incorporará a alguien de la cantera.
Además, el rival de hoy, el Villarreal de Setién, es un hueso duro de roer es csu campo y viene precisamente de derrotar al Madrid en LaLiga hace apenas 11 días. Esta vez la Copa del Rey es un torneo de K.O. a un solo partido, así que no habrá posibilidades más allá de hoy si vuelven a perder los merengues.
La copa del Rey nunca ha sido un torneo que se le facilite al Real Madrid, que suele pinchar en partidos sin trascendencia y no gana la competición desde 2014, cuando se produjo un memorable gol de Gareth Bale en la final frente al Barça.
Luego han seguido historias que han llegado a crear toda una cábala negra sobre el Real Madrid y el torneo. En la temporada 2015-2016, quedó eliminado el club por una alineación indebida y en la 2020-2021, quedaron en el camino eliminados por el pequeño Alcoyano, que luego no pudo ir´más allá en la competición.
La copa del Rey le ha sido esquiva al Real Madrid desde 1993, ya que solamente ha podido levantar el trofeo desde entonces en 2011 y en 2014. Los merengues son terceros en trofeos del Rey ganados. Primero es Barcelona (31), luego el Athletic de Bilbao (23) y los blancos con 19.
La incógnita es si Ancelotti encontrará las teclas para superar esta vez a la escuadra de Setién, que tan bien los dominó hace menos de dos semanas.