Reclama protección policial cuando viaje a su país; él paga su seguridad en Estados Unidos
El príncipe Harry, nieto de la reina Isabel II, ha enfatizado que «no se siente seguro» cuando visita Reino Unido, en el marco de una audiencia relacionada con su reclamo para pagar por protección policial en el país.
Así, el equipo legal del príncipe ha afirmado que Harry considera que no tiene garantizada su seguridad cuando visita Reino Unido, un lugar que considera «es, y siempre será, su hogar», recoge el diario británico ‘The Guardian’.
Ya anteriormente se había deslizado desde el equipo del príncipe que, tanto él como su mujer y sus hijos, quieren llevar a sus hijos de visita desde Estados Unidos a las islas, pero que por el momento «no pueden regresar a su hogar» debido a las condiciones de seguridad.
Los duques de Sussex perdieron su protección policial sufragada con los impuestos de Reino Unido cuando dieron el paso de abandonar el papel que desempeñaban en la familia real británica. Desde entonces, Harry y su mujer, Meghan Markle, financian ellos mismos su seguridad en Estados Unidos, donde tienen fijada su residencia.
Ahora, el príncipe se encuentra inmerso en un proceso judicial tras reclamar una revisión judicial de una decisión del Ministerio del Interior británico de no concederle protección policial.
«Este reclamo se trata del hecho de que el demandante no se siente seguro cuando está en Reino Unido debido a las disposiciones de seguridad que se le aplicaron en junio de 2021, y seguirán aplicándosele si regresa», ha trasladado su representante legal, Shaheed Fatima.
Uno de los episodios de inseguridad a los que se refiere el duque de Sussex se remonta a junio de 2021, cuando viajó hasta Reino Unido para inaugurar una estatua de su madre, la difunda Diana de Gales. En aquel momento, según algunos informes, el vehículo en el que se desplazaba Harry fue perseguido por fotógrafos.