España registró el domingo 164 fallecimientos por el nuevo coronavirus, el número diario de víctimas mortales más bajo en cerca de siete semanas, mientras el país flexibiliza gradualmente sus medidas de confinamiento, entre las más estrictas de Europa.
Estas cifras del ministerio de Sanidad elevan el número total de fallecidos por la pandemia en el país a 25.264, el cuarto más elevado después de Estados Unidos, Italia y Reino Unido.
Se trata del menor incremento diario de víctimas mortales desde el 18 de marzo, cuando se registraron 107 decesos, aunque el coordinador de emergencias del ministerio, Fernando Simón, afirmó que la cifra debe ser interpretada con «cuidado», ya que se está en pleno largo fin de semana feriado, cuando los registros proporcionados por los hospitales suelen ser menores.
«Son cifras muy buenas que confirman la tendencia que hemos observado y que tiene que consolidarse en los próximos días. Es una cifra muy buena si la comparamos con los días anteriores» aseguró en rueda de prensa.
Sin embargo, precisó: «Es un fin de semana (…) largo con lo cual estos descensos tienen que tomarse con cuidado y a ver si se consolidan en los próximos días».
El número de nuevos casos aumentó solamente en 838 hasta 217.466, con lo que es el décimo día consecutivo en que el número de pacientes curados (1.654) supera el de infectados.
Los expertos de salud creen que el pico máximo de la epidemia se produjo el 2 de abril, cuando 950 murieron en 24 horas. Desde entonces, la cifra de víctimas mortales se ha reducido gradualmente en España.
España, con 47 millones de habitantes, ha impuesto desde el 14 de marzo uno de los más estrictos confinamientos del mundo, con autorización unicamente para salir a comprar medicamentos, comida o pasear a los perros. Ese confinamiento ha sido aligerado y desde el sábado se permite a los españoles salir a hacer ejercicio o pasear una vez al día.