La crisis del nuevo coronavirus dejó ya «más de 40 millones de euros de pérdidas» (45 millones de dólares) al museo del Louvre, indicó su presidente, que anunció un «plan de transformación» de cara a los Juegos Olímpicos de París de 2024.
«Está lo que pudimos constatar y lo que se puede estimar: perdimos más de 40 millones de euros entre la taquilla, el alquiler de espacios e ingresos diversos», declaró en una rueda de prensa Jean-Luc Martínez, máximo responsable del museo más visitado del mundo, con 9.6 millones de entradas en 2019.
El resto, «dependerá de las visitas este verano y otoño» boreales, explicó. Sin embargo, las previsiones no son alentadoras.
«Vamos a atravesar unos tres años de menor frecuentación», previó Martínez, que a falta de turistas extranjeros confía en atraer al Louvre a más parisinos y habitantes de la periferia.
«Perdemos 80% de nuestro público. 75% de nuestros visitantes son de origen extranjero. Como mucho, tendremos 20/30% de nuestro público este verano (respecto al precedente): entre 4,000/5,000 y 10,000 visitantes por día», valoró.
«Trabajamos con el ministro (de Cultura) Franck Riester en un plan de transformación del museo», que estará acompañado de una petición «de ayuda financiera» al Estado, que ya es el «primer mecenas» del museo.
«Tenemos que estar listos en 2023/2024 y preparar los Juegos Olímpicos. Abrir más horas, más salas, es la apuesta de 2024», resumió.
Por otra parte, el sitio internet del Louvre, cuya frecuentación se multiplicó por 10 desde el estallido de la epidemia «se renovará por completo el año que viene» y «se colgarán todas las colecciones», explicó.