El grupo yihadista Estado Islámico (EI) sigue siendo una amenaza en Siria e Irak, y en algunas áreas incluso ha ganado poder a pesar de la eliminación de su «califato», dijo este martes el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo.
«Hay lugares en los que ISIS es más poderoso hoy que hace tres o cuatro años», admitió Pompeo en el programa «This Morning» de la cadena CBS, utilizando el acrónimo en inglés del grupo.
«Pero el califato desapareció en cuanto a su capacidad para llevar adelante ataques en el extranjero, se les ha vuelto mucho más difícil», dijo.
«Hemos desmontado un riesgo significativo. No todo, pero una cantidad importante. Estamos muy satisfechos con el trabajo que hemos realizado».
El presidente estadounidense, Donald Trump, dijo meses atrás que las fuerzas lideradas por Estados Unidos en Siria e Irak habían alcanzado una «victoria de 100%» sobre el grupo extremista islámico.
Pero se cree que muchos combatientes se mezclaron con la población, y que el grupo mantiene pequeños dominios en lugares remotos en Irak.
A principios de mes, un informe del inspector general del Pentágono constató un «resurgimiento» del EI en Siria e Irak, en parte gracias al espacio que ha dejado la reducción o reasignación de algunas fuerzas de seguridad en la región por parte de Estados Unidos.
El EI también se ha convertido en una potente amenaza en Afganistán, donde actúa independientemente de los talibanes, que actualmente están negociando un acuerdo de paz con Estados Unidos.
El grupo se adjudicó el atentado suicida que el sábado mató a 63 personas en una boda en Kabul.