El supercómico de las Moralejas viaja a Israel a recibir un doctorado en filosofía otorgado por la Universidad Hebrea de Jerusalén. Los judíos muelen fino con la infinita ayuda de Jehová —que siempre está de su lado— y cada vez que localizan a uno que no aterriza, se aprovechan de él otorgándole un doctorado y conquistándolo para su redil contra el islam. Mas el islam es cardamomo. No todo es café con aroma de mujer…
Para llevar a su redil —en la conquista por adueñarse de Palestina y de la totalidad de Jerusalén— Israel es capaz de cualquier cosa, incluso de otorgarle un doctorado en filosofía a alguien que por años se ha burlado de Aristóteles y de la Real Academia Española de la Lengua, montando sketches que parodian ¡irreverentes!, tanto al estagirita como a la Docta Corporación. La causa es por la lucha que, contra la corrupción, ha establecido Jimmy como si no fuera él, cínica parte de la misma.
Están muy claras cuales son las intenciones geopolíticas de los judíos: deliran por adueñarse completamente de la Ciudad Santa, al extremo de intentar convencer —a las ingenuas naciones de América Latina— de que se trasladen de Tel Aviv a Jerusalén que comparten con los árabes —del mundo— puesto que la mezquita de la Roca —o de Omar— es sitio sagrado para todos los creyentes en Alá. Asimismo, alucinan con echar a los palestinos de la Franja de Gaza, de la que también se consideran propietarios seculares. Con tal propósito son capaces de repartir doctorados a impresentables como nuestro Presidente y entregárselo por su eficiente lucha contra la corrupción. Lejos de estar en contra de la corrupción Morales Cabrera más bien la cultiva febricitante. Por ahora, a la vera de su harmano y con su hijo. Pero si se llegaran a comprobar las acusaciones del narcotraficante 3M, alias el Fantasma, tanto él como su vicepresidente, Jafeth Cabrera, estarían listos para un inminente antejuicio. A pesar de que Israel concede doctorados bajo intereses creados, debió haber tomado en cuenta todos los sambenitos que ya le cuelgan a Aristónteles antes de haberlo distinguido con tales merecimientos. El que peca por la paga y el que paga por pecar.
Al mismo tiempo, y ya dentro de los muros nacionales, Jimmy juega un papel cada vez menos digno y más vergonzante también: el de prestarse para el malabar político de la oligarquía en el que él hace el papel de títere descarado.
La clase realmente gobernante del país —me refiero a la alta burguesía, puesto que no hay que estar en el Gobierno o en el Ejecutivo para gobernar— desde que colocó a Morales Cabrera en la presidencia, sigue un plan perfecto en la consecución de apropiarse absolutamente del país. Y lo está logrando con creces.
Cuando Morales Cabrera tomó posesión, su partido —el FCN-Nación— era perdedor en el Congreso. Pronto se convirtió en mayoría mediante la compra-venta de dipucacos y el paso inmediato fue inminente: la presidencia del Legislativo ahora con el arribo de Óscar Chinchilla: títere del títere.
Sigamos, y por si no fuera suficiente, también —por manipulaciones del ejecutivo y de la alta burguesía— llega a la presidencia del poder Judicial Silvia Patricia Valdés Quezada, una señora que asimismo es vendible como comprable y alquilable, y que de todos es conocida como incondicional de la extremísima derecha, y guignol del señor doctor honoris causa.
Durante todo el año se rumoreó !hasta el agotamiento!, —incluso en medios de televisión como Vea Canal, donde se traman los mejores golpes de Estado imposibles— que el Presidente no duraría un trimestre, luego medio año y que finalmente caería hacia octubre o noviembre de 2016. Y en cambio, ahora parece consolidarse tras el espaldarazo que le dieron cerca del Muro de los Lamentos, convirtiéndolo en doctor. Él que sólo era licenciao de la otrora estricta San Carlos, que también da distinciones vía copypaste-Baldizón.
La única que pierde y pierde con todo esto es la pobre-paupérrima Guatemala, que deviene país con gobiernos y Estado cada vez más absolutista. Y con un rasgo más de decadencia: que tal absolutismo ¡no ilustrado, para acabar de fregar!, recae en la clase dominadora y represora: en la alta burguesía coronada por lo más conspicuo del CACIF.
Ahí quería llegar: desde que Aristónteles y familia fue hospedado en el Hotel Arkadia, la suerte estaba echada. Y a ello hay que sumar la horrible coda satánica de la que iba precedido, aunque fuera cola: la de AVEMILGUA, que había devenido FCN-Nación.
La vieja guardia castrense —de la más dura y oscura tradición— trata ahora de librarse —con los cooperacha y las cohorte nigérrima de Pérez y la Baldetti— de la cárcel tanto por sus crímenes de lesa humanidad, como por toda la inenarrable producción de corrupción ya conocida. Ello, sumado a la sed de absolutismo en el poder de la clase represora, da por resultado la madre de todas las manipulaciones. Esta que ahora vemos de bulto.
Al final de 2016 estamos de cara al absolutismo de Estado. Los tres poderes han sido tomados, poseídos, raptados —que no cooptados, bobito Colombiano— por una clase dominadora que, sin mancharse las manos directamente, maneja tres títeres unificados: el ejecutivo con Aristónteles, el Legislativo con Chinchilla y el Judicial con la Patty. ¿Qué más desea la Oligarquía para hacer de Guatemala, la Guatemala Inmutable y la Guatemala aycinenista? Es decir, la Guatemala de don Francisco Antonio de Fuentes y Guzmán o la Patria del Criollo.