El técnico del Real Madrid, Zinedine Zidane, consideró este viernes que el clásico liguero del sábado contra el Barcelona es «un escenario importante para cambiar nuestra imagen» y el rumbo del equipo, tras dos derrotas consecutivas, sin mostrarse muy preocupado por su continuidad.
«Es lo que se dice (que se juega el puesto en ese partido). ¿Qué cambia? No cambia nada. El año pasado fue igual, en mi primera etapa igual. Lo que tengo que hacer, es hacer mi trabajo«, dijo Zidane en la rueda de prensa previa al partido.
«Cuando se hace un mal partido, uno está expuesto a las críticas, a pensar que lo van a echar», reconoció Zidane, pero lo importante es «decirse que mañana tenemos la oportunidad de hacer un gran partido y nos preparamos para eso, para cambiar las cosas».
«Al final, lo bueno del fútbol es que tú puedes cambiar la situación. Vamos a intentar hacer un gran partido de fútbol. Pensar en positivo y en hacer un gran partido de fútbol», dijo Zidane, que espera que la exigencia del Barça ayude a que los jugadores entren metidos en el partido desde el principio.
«Vamos a tener un partido difícil, es bueno para nosotros meternos en un campo con un partido complicado desde el principio«, dijo Zidane, que en los últimos días ha insistido en que es el responsable de los últimos malos resultados y el que tiene que buscar soluciones.
«Siempre he sido crítico conmigo, es el motor para mejorar, pero estamos juntos y las cosas las podemos cambiar todos juntos. Después de una derrota, como entrenador, la mayor parte de las criticas las recibo yo, y es normal, pero no vivo en el pasado«, añadió.
El técnico blanco adelantó que podrá contar con su capitán Sergio Ramos, cuya ausencia lastró el rendimiento del equipo el miércoles frente al Shakhtar Donetsk en Champions (derrota 3-2).
«Sergio es nuestro capitán, nuestro líder. No vamos a arriesgar nada. Está recuperado, va a estar con nosotros. Se trata de estar al 100% y creo que Sergio lo está», aseguró Zidane.