Novak Djokovic (1º ATP) derrotó al ruso Karen Kachanov (16º); 6-4, 6-3 y 6-3, este lunes en octavos de Roland Garros y espera en cuartos a Pablo Carreño, si el español derrota al alemán Daniel Altmaier (186º), en lo que sería la revancha de los octavos del pasado US Open.
El pasado mes en Nueva York el serbio jugaba contra el español y perdió los nervios, soltando un pelotazo que golpeó en la garganta de una juez de línea, lo que le costó la expulsión y supuso el pase a cuartos de Carreño, eliminado por Alexander Zverev en semifinales.
Fue la única derrota de Djokovic esta temporada, en la que suma 35 triunfos. Ante Khachanov acertó con 44 ‘winners’ y siguió jugando muchas dejadas, un arma en alza en este Roland Garros del frío y la humedad, lo que se traduce en bolas pesadas.
«Fue un partido más igualado que lo que dice el resultado. Al final encontré mi servicio. Evidentemente adoro las dejadas, a veces demasiado, creo que un buen golpe para hacer variaciones tácticas, especialmente con un jugador como Karen que juega bien detrás de la línea pero delante no es demasiado bueno», analizó en francés Djokovic a pie de pista.
El serbio no ha perdido un set en la presente edición de Roland Garros, en la que aseguró disputar los cuartos por 14ª vez, con un triunfo, en 2016.
«La ambición es muy grande, pero debo mirar solo el próximo partido, el siguiente adversario. Me siento bien en la pista, así que adelante«, añadió.
Ante Khachanov, al que derrotó en dos horas y 23 minutos, el serbio aprovechó 6 de sus 15 bolas de rotura, mientras que el ruso acertó con 2 de 9.
Con el saque Djokovic ganó el 70% de los puntos con el primer servicio, mientras que Khachanov se quedó en un 51%.