Este día la Secretaría de Comunicación Social de la Presidencia dio a conocer que el director del Instituto Guatemalteco de Migración (IGM), Guillermo Díaz, había sido removido de ese cargo por supuestas anomalías a lo interno de la institución, la supuesta separación se habría dado luego que los ministros de Gobernación, Trabajo, Desarrollo Social y Cancillería pidieran al presidente Alejandro Giammattei retirarlo del puesto.
Pero esa información fue desmentida por el mismo Díaz, quien en conferencia de prensa aseguró que aún continúa al frente del IGM.
“Hasta el momento no he sido notificado de ser removido del cargo, sin embargo, he escuchado que el presidente Alejandro Giammattei ya tomó esa decisión”, dijo.
Díaz aseguró que su gestión se ha caracterizado en beneficiar a los migrantes. “Los miembros de la Autoridad Migratoria no tienen la potestad de juzgar mis actos y se extralimitaron en sus funciones”, dijo. Ante ello, el aún director del IGM presentó una acción de amparo para continuar en el puesto.
“Mi deseo es transparentar mi gestión y en ningún momento me aferraría a ningún cargo. Me siento vulnerado y atacado en mis derechos. No hubo ningún respeto hacia mi persona como funcionario. Tomaron decisiones arrebatadas y no conforme a Derecho y no se respetó el debido proceso”, indicó Díaz.
«Los ministros que el día de ayer estuvieron acá muy fuertemente insistiendo en que la guillotina pasara por mí, fueron instruidos por el presidente», indicó Díaz, en relación a lo que se le ha señalado.
Decisión
A través de un comunicado, el Gobierno informó que la decisión se tomó luego de analizar la gestión del exdirector del IGM y de haber recibido un oficio con “señalamientos” por parte de la Comisión Presidencial contra la Corrupción y de la Contraloría General de Cuentas (CGC), aunque no se especifica de qué se trata.
El documento añade que se brindó la oportunidad a Díaz para esclarecer los señalamientos pero la Autoridad Migratoria Nacional determinó que los argumentos y los documentos de soporte presentados para desvanecerlos no fueron suficientes.
“Luego de analizar los indicios que dan cuenta que el Director General incurrió en actos evidentemente opuestos a las funciones e intereses del Instituto Guatemalteco de Migración y del Estado de Guatemala, lo cual es considerado como causal de remoción”, señala el comunicado.
Castillo: viola el debido proceso
Luego de que se difundiera el comunicado, el vicepresidente Guillermo Castillo, quien no aparece como firmante de la misiva, arremetió contra esa decisión, tachándola de violatoria al debido proceso y de muy mala fe.
“Eso es algo fuera de lugar. Violatorio del debido proceso y de muy mala fe. Por ello aparece como mayoría, no unanimidad. Yo no estuve de acuerdo”, dijo el vicemandatario durante una entrevista radial.