Dinamarca anunció el jueves el cierre de una región donde surgió una versión mutante del coronavirus a causa de visones, mientras que Inglaterra iniciaba su segundo confinamiento en una Europa que vive una «explosión» de contagios, según la OMS.
En todo el mundo, el covid-19 ha causado más de 1.2 millones de muertos y contagiado a 48 millones desde diciembre pasado, según un recuento realizado por la AFP este jueves a partir de datos oficiales. Europa es la región donde el virus avanza más rápido.
“Vemos una explosión (…) en el sentido de que solo han sido necesarios un par de días para ver como la región europea registraba un incremento de más de un millón de casos”, explicó a la AFP el director regional para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Hans Kluge.
- El rápido avance de la segunda ola convirtió el jueves a Europa en la región más afectada del mundo, con 11.7 millones de casos (de ellos 293,000 decesos), superando en contagios a América Latina y el Caribe, que suman 11.4 millones de contagiados y casi 407,000 muertos.
- Por si fuera poco, se sumó la inquietud por una mutación del virus en Dinamarca que podría amenazar la eficacia de una futura vacuna para los humanos.
El país nórdico anunció este jueves que, a partir de esta noche, más de 280,000 habitantes de siete municipios de la región de Jutlandia (noroeste) deberán quedarse en sus localidades para impedir nuevos contagios del coronavirus mutado proveniente de visones.
Más de 15 millones de visones serán sacrificados, tras descubrirse la mutación del virus, transmitida a 12 personas. “Los ojos del mundo nos contemplan”, afirmó la primera ministra, Mette Frederiksen.
- En Reino Unido, el país europeo más castigado por la pandemia con casi 48,000 muertos
- los 56 millones de habitantes de Inglaterra sólo podrán, desde este jueves y durante cuatro semanas, salir de sus casas para comprar comida, ir al médico, hacer ejercicio o ir a trabajar si no pueden hacer teletrabajo.
Tras haberse resistido a un segundo confinamiento, el gobierno de Boris Johnson siguió los pasos de vecinos como Francia e Irlanda.
Relajamiento en América Latina y más casos en EE. UU.
En America Latina, por el contrario de Europa, las medidas se han relajado.
En Perú (911,787 casos y 34,671 fallecimientos), el país con la mayor tasa de mortalidad en el mundo con 107,27 muertes cada 100,000 habitantes, las iglesias celebrarán misas y ceremonias a partir del 15 de noviembre.
Cada vez más ecuatorianos están relajándose frente a la pandemia, lo que llevó a ciudades como Guayaquil a anunciar restricciones para los fines de semana y las fiestas de fin de año, mientras en Quito se multiplicaron las aglomeraciones, principal vector de contagio.
En medio del fragor de sus peleadas elecciones, Estados Unidos registró un nuevo récord diario de 123,085 nuevos contagiados sumando más de de 23 mil casos al pico registrado el día anterior, según un recuento de la Universidad Johns Hopkins.
Más medidas en Europa
Mientras, las restricciones no dejan de aumentar en Europa.
Portugal, donde ya el 70% de su población está en confinamiento, quedará bajo emergencia sanitaria a partir del lunes durante dos semanas, para permitir al gobierno endurecer las restricciones, según un proyecto de decreto presidencial revelado este jueves.
Grecia se confinará a partir del sábado, durante tres semanas, anunció este jueves el primer ministro Kyriakos Mitsotakis.
Ciudad de la luz
En París, confinada como toda Francia desde el 30 de octubre, las autoridades municipales anunciaron que cerrarán a partir de las 22H00 establecimientos que venden alcohol y comida para llevar “porque en algunos casos ha habido abusos”.
Al advertir que la segunda ola “es brutal y se propaga rápidamente”, el director general de la Salud, Jérôme Salomon, dijo este jueves que en las últimas 24 horas se registraron más de 58,000 nuevos casos en Francia, que suma 1,6 millones de casos.
A diferencia del primer confinamiento, Grecia, Inglaterra, Francia y otros países europeos permiten esta vez que las escuelas permanezcan abiertas.
Italia
Aún traumatizada por la primera ola, empezó el jueves por la noche un toque de queda de 22H00 a 05H00 hasta el 3 de diciembre. Suma ya 39,000 muertos y 750.000 contagios e intenta frenar la segunda ola pandémica.
En España, que supera los 1.2 millones de casos y roza los 36,500 fallecidos, el gobierno está bajo presión para imitar a otros países europeos y decretar un confinamiento domiciliario.
Austria tiene un toque de queda nocturno, Polonia cerró sus bares y tiendas, y Hungría reimpuso el estado de alarma.
El aumento de contagios en Europa ha desvanecido las esperanzas de una rápida recuperación económica. Según la Comisión Europea, el PIB de la Eurozona caerá un 7.8% este año y el repunte en 2021 será menos fuerte de lo esperado, +4.2%, frente al +6.1% estimado en julio.