- La misión diplomática inició sus primeras audiencias con el presidente, el Congreso y altas autoridades del sistema judicial, con el objetivo de recabar la suficiente información y entender la complejidad de la crisis política en el país sudamericano.
LIMA — La delegación de alto nivel de la Organización de los Estados Americanos (OEA) inició este lunes en Lima sus reuniones como enviada parte de la Comisión Permanente, que aprobó activar la Carta Democrática Interamericana a pedido del Gobierno ante la denuncia por parte del presidente peruano, Pedro Castillo, de que hay “un golpe de Estado en marcha” contra su administración.
A primera hora, los cancilleres Juan Carlos Holguín (Ecuador), Julio Arriola (Paraguay) y Eamon Courtenay (Belice); los vicecancilleres Pablo Tettamanti (Argentina), Laura Gil (Colombia) y Christian Guillermet (Costa Rica); y el representante del secretario general Luis Almagro, Eladio Loizaga; fueron recibidos en Palacio de Gobierno peruano.
El presidente Castillo estuvo acompañado por la vicepresidenta Dina Boluarte, el primer ministro Aníbal Torres, el canciller César Landa y otros integrantes del Gabinete Ministerial.
La reunión tuvo lugar en la sede del Ejecutivo y duró dos horas. Tras ello, Castillo publicó un mensaje en su cuenta de Twitter, en el que refirió su encuentro con la delegación con la que se encontró, según dijo, “para que conozcan lo que sucede en el Perú y cómo algunos sectores quieren poner en peligro la democracia y estabilidad del país con mentiras para golpear una gestión enfocada en trabajar por el progreso e igualdad para todos”.
Horas después, el ministro de Trabajo, Alejandro Salas, uno de los voceros habituales del gobierno de Castillo, dio algunos detalles de lo hablado con los enviados de la OEA.
“Durante la reunión que sostuvimos en la mañana con la misión de la OEA que visita el Perú, el presidente Pedro Castillo solo ha pedido la unidad, diálogo, consenso y acercamiento para sacar adelante los problemas que tiene el país”, anotó Salas en una actividad pública.
Luego, la delegación de la OEA llegó al Congreso de la República para sostener una audiencia con su titular, José Williams, y los demás miembros de su Mesa Directiva: los parlamentarios Martha Moyano (primera vicepresidenta), Digna Calle (segunda vicepresidenta) y Alejandro Muñante (tercer vicepresidente). A petición de los congresistas, inicialmente la sesión debía ser a puertas abiertas, aunque luego se celebró en privado a petición de uno de los integrantes de la comisión.
Sin embargo, los parlamentarios ofrecieron una conferencia de prensa para dar a conocer su conversación con los delegados de la OEA.
«Le dijimos que existen fuerte fricciones [con el Ejecutivo], pero no nos ha llevado a una crisis, menos a que se precipite. Le dijimos que no hay intención de parte del Congreso de hacer un golpe de Estado. Somos respetuosos de la democracia», afirmó Williams.
Además, el titular del Parlamento agregó que les explicaron a los diplomáticos que hay tres denuncias constitucionales contra el presidente Castillo. «No somos un Congreso golpista ni mucho menos de lo que corresponde a lo que está establecido en nuestra Constitución y en el reglamento del Congreso», recalcó sobre las críticas del Ejecutivo por un supuesto golpe en marcha.
Fiscalía General
En la tarde, la delegación de la OEA se reunió con la fiscal general Patricia Benavides, quien explicó la denuncia constitucional presentada contra el mandatario por los presuntos delitos de organización criminal, colusión y tráfico de influencias en el marco de los casos Puente Tarata y Petroperú.
Además, Benavides especificó que el presidente de Perú es investigado por los ascensos irregulares en las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional en noviembre del año pasado, un «presunto encubrimiento» para no atrapar a los prófugos de su gobierno y la red criminal que habría direccionado licitaciones públicas en regiones del país a través del Ministerio de Vivienda.
La titular del Ministerio Público también informó a la delegación de la OEA que ha sido víctima de ataques del Gobierno para obstruir las investigaciones que involucran a Castillo. Al cierre de este despacho, los voceros de las bancadas parlamentarias se reunían con la delegación.
Mañana será el turno de la Iglesia, organizaciones de la sociedad civil y gremios de la prensa peruana que también brindarán su percepción de la crisis política en Perú.