Las autoridades sanitarias de Cuba han notificado este miércoles otros 6,080 contagios y 51 muertes a causa de la enfermedad, una cifra que se convierte en la más alta de fallecidos desde el inicio de la pandemia y que se enmarca en el incremento de la incidencia que viene registrando el país desde hace varias semanas.
El Ministerio de Salud ha contabilizado hasta el momento 256,607 casos de COVID-19, mientras que 1,659 pacientes contagiados de la enfermedad han fallecido desde que estallara la pandemia.
El último balance epidemiológico refleja que hay 28,913 casos activos, mientras que un total de 64,561 pacientes están ingresados, 17,625 de ellos sospechosos y 8,023 en vigilancia.
A pesar de que Cuba no ha iniciado su estrategia de vacunación masiva de la población, 1,894,508 personas han recibido la pauta completa de vacunación, de los 11.4 millones de habitantes que tiene la isla.
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