Cristiano Ronaldo, molesto por su suspensión de cinco partidos, respondió este miércoles con un bonito gol y pase decisivo para permitir al Real Madrid ganar 2-1 a la Fiorentina y llevarse el Trofeo Bernabéu.
El cuatro veces Balón de Oro portugués, sancionado por haber empujado a un árbitro, todavía tiene que cumplir tres partidos en Liga antes de poder volver a jugar con su equipo.
Sin embargo, aprovechó este partido amistoso en el Santiago Bernabéu para probar su excelente momento de forma en este inicio de temporada.
Poco después de que el francés Jordan Veretout abriera el marcador para la Fiorentina, con un tiro ajustado al palo (4), Cristiano dejó en bandeja el empate a Borja Mayoral.
El luso hizo su habitual bicicleta antes de centrar hacia la portería, donde apareció Borja Mayoral para hacer el 1-1 (7).
Cristiano se encargó después de hacer el tanto de la victoria con un gol similar al conseguido contra el FC Barcelona el 13 de agosto (3-1) soltando un disparo cruzado que se coló por la escuadra de la portería italiana (33).
El astro portugués, que jugó los 90 minutos para mantener la forma, también estrelló un balón en el palo con un disparo casi sin ángulo (82).
El Real Madrid aprovechó que su amplio dominio para hacer rotar a sus hombres tras el descanso.
Entre los futbolistas que jugaron este miércoles sobre el césped del Santiago Bernabéu estuvo el portero Luca Zidane, segundo de los cuatro hijos del técnico francés, que debutó en el feudo blanco jugando la segunda parte.
En el equipo contrario también jugó el delantero Giovanni Simeone, hijo del técnico del Atlético de Madrid, Diego Simeone.
El hijo del ‘Cholo’ jugó los 45 primeros minutos, pero no logró perforar la portería blanca.