Costa Rica abrirá totalmente sus fronteras aéreas, cerradas desde marzo por la pandemia de la covid-19, antes del inicio de la temporada alta de turismo internacional en noviembre, anunció este viernes el gobierno.
El país comenzó en agosto la reapertura paulatina de sus fronteras aéreas para recibir a algunos extranjeros, y a partir del 1 de noviembre podrá recibir visitantes sin restricciones por nacionalidad, indicó el ministro de Turismo, Gustavo Segura.
«Este anuncio se da con miras a la temporada alta que inicia a finales de noviembre y permitirá aumentar la generación de divisas y empleos«, dijo Segura en conferencia de prensa.
Agregó que «cada turista que visita el país activa una serie de encadenamientos productivos como agricultura, pesca, comercio, transporte, guías turísticos, hotelería, restaurantes, operadores y artesanos», lo que ayuda a reactivar la decaída economía del país.
Datos del gobierno indican que solo la apertura a Estados Unidos ayudará a recuperar 80,000 de los empleos perdidos por las medidas restrictivas en el mundo para contener la pandemia, y generar 1,500 millones de dólares en 2021.
Costa Rica pide a los visitantes extranjeros presentar una prueba negativa de covid-19 para ingresar al país, y un seguro de viajes que cubra eventualidades provocadas por el virus, como gastos médicos y la posible extensión de la estadía.
El turismo es clave para la economía de Costa Rica, que recibía cada año más de tres millones de visitantes del exterior antes de la pandemia.
El sector, uno de los más golpeados por la crisis sanitaria mundial, aportaba 8% del PIB costarricense, equivalente a unos 4,000 millones de dólares, y generaba 600.000 empleos directos e indirectos, según datos oficiales.