La Corte Suprema de Justicia de Estados Unidos otorgó el miércoles una victoria al gobierno de Donald Trump al dejar en vigencia el programa «Permanecer en México», que ha permitido enviar a ese país a más de 60,000 solicitantes de asilo.
El máximo tribunal de justicia del país dio la razón a la administración Trump, que le había pedido de manera urgente que levantara un bloqueo parcial a ese programa impuesto por la Corte de Apelaciones del Noveno Circuito de Estados Unidos, con sede en San Francisco.
La Corte Suprema dijo que concedió una suspensión de la decisión de esa corte inferior de manera temporal hasta que se considere completamente el asunto.
Anunciada en diciembre de 2018 e implementada un mes después, la política de Protocolos de Protección de Migrantes (MPP), más conocida como «Permanecer en México», establece que todos los solicitantes de asilo que llegan a la frontera sur de Estados Unidos esperen la resolución de sus casos en territorio mexicano.
Según la Casa Blanca, más de 60,000 migrantes, la gran mayoría centromericanos que huyen de la pobreza y la violencia en sus países, han sido devueltos a México en los 13 meses de implementación del programa.
La Corte de Apelaciones del Noveno Circuito emitió el 28 de febrero un fallo bloqueando esta política por considerarla ilegal, pero lo suspendió mientras la administración Trump apelaba ante la Corte Suprema.
El gobierno republicano solicitó de manera urgente al alto tribunal que bloqueara el fallo judicial. En un documento, argumentó que, si esa orden entrara en vigencia, «un número sustancial de los hasta 25.000 extranjeros que están en espera de un proceso en México se apresurarán de inmediato a ingresar a Estados Unidos».
«Un aumento de esa magnitud impondría cargas extraordinarias a Estados Unidos y dañaría nuestras relaciones diplomáticas con el gobierno de México», agregó el gobierno.
La Corte Suprema accedió al planteo de la administración Trump.
La orden del tribunal «se suspende en espera» de la consideración de los argumentos sobre el fondo del tema, decidió sin dar más explicaciones.
La jueza progresista Sonia Sotomayor dijo que discrepaba con esta decisión.
La Corte Suprema renovada por Trump, que ha nominado jueces de tendencia conservadora, le ha otorgado a la administración republicana victorias significativas en temas de inmigración en los últimos meses.
La autorizó a financiar la construcción de un muro en la frontera sur con fondos militares y a penalizar a los migrantes que se benefician de la asistencia social estadounidense.
Trump, que espera ganar un segundo mandato el 3 de noviembre, ha hecho de la lucha contra la inmigración ilegal uno de los sellos distintivos de su presidencia.