- Informe de la ONU muestra que el país ha sido incapaz en resolver el problema. Arévalo dice que la corrupción es causa de los atrasos sociales del país.
Era un acto para que funcionarios de la ONU presentaran el Informe Anual de Resultados 2023: “En camino hacia la cumbre del futuro”,, que se refiere a los programas de asistencia y muestra cifras de la situación del país, principalmente los índices de desarrollo humanos, en los que Guatemala aparece entre los de mayor pobreza y, sobre todo, desnutrición infantil, pero el tema de fondo resultó ser la corrupción.
El presidente Bernardo Arévalo participó en el acto organizado por el ente internacional y en su discurso destacó que «una minoría corrupta continúa intentando atacar nuestro sistema democrático», e hizo un llamado para unir esfuerzos para erradicar ese mal en el país.
El exvicepresidente Eduardo Stein, otro de los oradores en la presentación de la ONU, dijo que «la desnutrición en Guatemala es igual a un genocidio», porque el daño que provoca en los menores los marca para toda la vida, PUES pierden facultades que no se recuperan de ninguna manera. «Es una vergüenza nacional» dijo el exfuncionario, quien indicó que «debe ser motivo de vergüenza para toda la sociedad», y que superar esta situación debiera ser «tarea del Gobierno, pero también de todos los guatemaltecos».
El informe detalla una serie de avances sustanciales en sus áreas estratégicas de trabajo y una inversión significativa para el desarrollo sostenible del país, a cargo de las agencias de las Naciones Unidas en Guatemala.
El presidente Arévalo expuso que el 2023 «fue un año muy desafiante en diversos aspectos, incluido el del combate a la corrupción, un asunto que no podemos dejar de mencionar en términos de la incidencia que tiene como freno para el desarrollo, pero también fue un tiempo fundamental para la defensa de la democracia».
El mandatario recordó que «la corrupción no sólo desvía recursos que deberían estar destinados a servicios esenciales como la salud, la educación y la infraestructura, sino que, fundamentalmente, socava la confianza de los ciudadanos en las instituciones públicas».
Resaltó que el año pasado, cuando se efectuaron las Elecciones Generales, el ahora partido oficial se impuso en las urnas, «pero sectores políticos señalados de corruptos intentaron boicotear el resultado en las urnas».
Advirtió que dicha «minoría corrupta continúa intentando atacar nuestro sistema democrático y por eso el apoyo de todas las fuerzas democráticas, de todos los liderazgos nacionales e internacionales sigue siendo fundamental»
Areévalo admitió en su mensaje que «actualmente los índices de desarrollo de nuestro país arrojan cifras alarmantes y desafiantes, en especial para el gobierno que debe dar respuestas inmediatas con recursos limitados a las muchísimas necesidades que se han acumulado de cientos de años y décadas de exclusión y de marginación».
Guatemala es el sexto país en el mundo con peor índice en desnutrición infantil, lo que refleja el nivel de falta de atención que ha existido ante este problema, atendido hasta la fecha solamente por organismos internacionales. Cada uno de los últimos gobiernos en Guatemala han proetido a su inicio mejorar el índice, pero todos han fallado en su intento, ya sea por ineficiencia o corrupción.