El hombre que asesinó a cuatro personas e hirió a más de 20 en Viena esta semana había expresado crecientes creencias religiosas extremistas antes del ataque, según su consejero de desradicalización, de acuerdo a fuentes de DPA.
El consejero, que trabaja con la organización sin ánimo de lucro Derad, informó de esto a las autoridades judiciales, dijo el cofundador de Derad, Moussa Al-Hassan Diaw.
Ataque terrorista
Sin embargo, el consejero no vio signos de que el joven hombre hubiera planeado un ataque sangriento, afirmó Diaw, quien considera de que no hay que culpar a las autoridades judiciales de lo sucedido.
El perpetrador del atentado, Kujtim Fejzulai, estuvo en prisión por intentar unirse al Estado Islámico en Siria, pero lo liberaron en diciembre con la condición de que trabajaría junto a los agentes de la condicional y Derad.
Este lunes, Fejzulai fue abatido por la bala de un agente de policía, nueve minutos después de iniciar un tiroteo.
Críticas
El canciller austriaco, Sebastian Kurz, criticó la liberación temprana a la que calificó de error, mientras que el ministro del Interior, Karl Nehammer, señaló que el terrorista engañó a Derad haciéndoles creer que no era un terrorista.
«No hay una decepción porque nuestro compañero en ningún momento pensó que este hombre estuviera desradicalizado«, respondió Diaw, negando la teoría del ministro.
Al contrario, el consejero de Fejzulai vio que su cliente estaba desarrollando dudas sobre su propia devoción, lo que es incluso más extremo que acusar a otros de falta de fe, según el experto en desradicalización.
«Esta duda sobre ti mismo lleva a veces a la desesperación», dijo explicando que a veces quien piensa así se dedica a la oración, los actos violentos o incluso el suicidio.
El ministro Nehammer reconoció este miércoles que los servicios de inteligencia cometieron errores después de saberse que Eslovaquia alertó en julio de que Fejzulai había intentado comprar munición en el país.