- La comisión de Postulación para nuevos magistrados de la Corte Suprema debe integrarse, mientras las pesquisidoras conocerán casos de antejuicio en contra de magistrados electorales.
El Congreso de la República, cada vez más controlado por la «vieja alianza» que operó durante la administración anterior, realizó este martes una sesión «productiva», en la que se convocó a la Comisión de Postulación para elegir magistrados de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), al mismo tiempo que se eligió por sorteo a dos comisiones pesquisidoras en los casos de denuncias en contra de magistrados del Tribunal Supremo Electoral (TSE).
Para la convocatoria de la comisión de postulación, se tuvo una votación con mayoría absoluta, y la misma debe ser integrada de la manera siguiente:
- Un representante de los Rectores de las Universidades del país, quien la preside
- Los Decanos de las Facultades de Derecho o Ciencias Jurídicas de las Universidades del país
- Un número equivalente de representantes electos por Asamblea General del Colegio de Abogados y Notarios.
El presidente Bernardo Arévalo ha solicitado a la OEA que le de seguimiento a este proceso para impedir los vicios del pasado, cuando «operadores» se mueven dentro de las comisiones para lograr que en las listas aparezcan sus candidatos, lo que ha resultado en la pérdida de la independencia del sector justicia.
En los debates de ayer, diputados de la «vieja alianza» de partidos políticos que promueven impunidad, criticaron y calificaron de injerencia el que un organismo internacional, como es la OEA, pueda llegar al país a «supervisar» el proceso.
La diputada Sandra Jovel, integrante del bloque Valor, rechazó la actitud del mandatario, asegurando que “es importantísimo porque tiene que haber, primero, una separación de poderes. Aquí es donde cada uno de los órganos del Estado debe de decidir realmente que va a suceder en el país”. Aunque Jovel es nueva en el Congreso, es una de las voceras de la «vieja alianza», convertida ahora en la alianza opositora, que poco a poco ha ido recobrando el control del Congreso.
Luego avanzó el proceso en contra de magistrados del TSE, a a los que el partido UNE de Sandra TSorres y las fuerzas ubicadas ahora en la oposición y bajo la acusación del MP, intentan manchar el proceso electoral que llevó a la presidencia a Bernardo Arévalo.
Las comisiones quedaron integradas de la siguiente manera tras un sorteo por medio de balotas:
La primera pesquisidora, contra los cinco magistrados titulares, tendrá como presidente y secretario a los diputados independientes, electos por Movimiento Semilla, Luis Cáceres y Román Castellanos. Como vocales están los diputados Mario Gálvez de la UNE, Rodrigo Pellecer de Comunidad Elefante y Mynor de la Rosa del bloque Vamos.
La segunda comisión, contra dos titulares y un suplente, quedaron los diputados Christian Joél Martínez, Vamos, como presidente; Luis Javier López, UNE, secretario; y los vocales son Nery Rodas, Cabal, Luis Ventura, Semilla, y Gerardín Día, Valor.
En la primera denuncia, la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) cuestiona actas de la segunda vuelta electoral por dudar de los resultados finales, aunque la ventaja a favor de Arévalo fue abrumadora y las elecciones fueron certificadas por todos los organismos de observación, nacionales e internacionales, que participaron en el evento.
En la segunda denuncia es contra los magistrados que aceptaron la inscripción de Manuel Baldizón como candidato a diputado por haber sido condenado en Estados Unidos por actos de corrupción, aunque su inscripción fue luego cancelada.